¿Milei y Villarruel? Más fríos que San Juan en invierno. Ni un mísero mate compartido en el Congreso. La transmisión oficial esquivó el saludo como si fuera la AFIP. ¿Se viene la temporada de pases en el Gabinete?
Villarruel, con cara de pocos amigos, ni aplaudió el discurso. Parece que el único liberalismo que comparten es el de no gastar saliva en cumplidos. ¿Y la cena en Rosada? Villarruel brillará por su ausencia. ¿Habrá asado o solo menú vegetariano para digerir la tensión?
La gélida apertura de sesiones: Milei y Villarruel, una dupla en punto de ebullición
La apertura de sesiones ordinarias del Congreso dejó en evidencia la tensa relación entre el presidente Javier Milei y su vice, Victoria Villarruel. La frialdad entre ambos fue palpable, incluso para las cámaras de la transmisión oficial, que estratégicamente evitaron mostrar el momento del saludo. Un contraste significativo con el efusivo abrazo que se dieron hace un año en la misma ceremonia. Villarruel, presidenta del Senado, limitó su interacción con Milei a un breve contacto físico y una sonrisa forzada, manteniendo sus manos sobre el escritorio durante el discurso presidencial y absteniéndose de aplaudir.
Un año de desencuentros: del abrazo efusivo a la distancia protocolar
La tensión entre ambos mandatarios se ha ido incrementando desde la victoria electoral de 2023. Diferencias en la conformación del Gabinete, la suba de las dietas de los senadores, la habilitación de la sesión para tratar el mega DNU y la postulación del juez Ariel Lijo para la Corte Suprema, entre otros temas, han generado rispideces y desencuentros públicos. Si bien hubo momentos de aparente distensión, como el abrazo en el aniversario de la guerra de Malvinas o la foto en un tanque de guerra durante el desfile del 9 de Julio, la relación se ha deteriorado progresivamente.
¿Cena para pocos?: Villarruel ausente en el agasajo presidencial
Como corolario de la fría jornada, la vicepresidenta no participará de la cena que el presidente ofrecerá en Casa Rosada para el gabinete y algunos invitados especiales, como Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados. Esta ausencia confirma la profunda grieta que separa a los dos máximos representantes del Poder Ejecutivo y plantea interrogantes sobre el futuro político de la dupla.