Acuerdo con el FMI: Milei busca blindaje en Diputados
El oficialismo, liderado por La Libertad Avanza, se prepara para una sesión crucial en la Cámara de Diputados este miércoles. El objetivo: aprobar el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que respalda el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) firmado por el presidente Javier Milei. Con la sesión convocada para las 10 de la mañana, el oficialismo busca asegurar la aprobación del decreto con el apoyo de aliados y legisladores que responden a gobernadores. La estrategia se centra en obtener al menos 130 votos afirmativos, lo que garantizaría el quórum y la mayoría simple necesaria para la aprobación.
Unión por la Patria, entre el rechazo y la incertidumbre
Mientras el oficialismo busca consolidar su apoyo, Unión por la Patria, con sus 98 diputados, anticipa un rechazo total al DNU. Sin embargo, persisten las dudas sobre la conducta de los legisladores que responden a gobernadores como Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Raúl Jalil (Catamarca), quienes han brindado apoyo al gobierno en votaciones anteriores. La posibilidad de «fugas» en el bloque kirchnerista agrega un elemento de incertidumbre al escenario.
Aliados estratégicos y la incógnita de los bloques provinciales
La Coalición Cívica, liderada por Elisa Carrió, confirmó su apoyo al DNU, aunque con reservas. En un comunicado, explicaron su decisión argumentando que la responsabilidad del programa económico recae en el Poder Ejecutivo. Se espera que la UCR, con sus 20 diputados, también vote a favor, al igual que el MID y los legisladores tucumanos que responden a Osvaldo Jaldo. La clave para alcanzar el quórum y la aprobación podría estar en los votos de bloques como Innovación Federal y Encuentro Federal, que responden a diversos gobernadores provinciales. La decisión de estos legisladores definirá el destino del DNU y el futuro del acuerdo con el FMI. La urgencia por sesionar esta semana se debe a la volatilidad de los mercados y a cuestiones logísticas, como un viaje programado de varios legisladores la semana próxima y un feriado la siguiente. La presión por una definición rápida marca el ritmo de la política argentina, una vez más.
