Jujuy en pie de guerra: la polémica designación del nuevo ministro de Seguridad
El nombramiento de Juan Manuel Pulleiro, coronel retirado, como ministro de Seguridad de Jujuy desató un vendaval de críticas y controversias en la provincia. La designación, que se produjo tras la renuncia del ex comisario Guillermo Corro, ha generado un inusual frente común entre sindicatos policiales y organismos de Derechos Humanos, quienes expresan su preocupación por la «militarización de la seguridad» y el posible avance del «autoritarismo».
Un foráneo al mando de la seguridad
La Federación Argentina de Sindicatos Policiales y Penitenciarios (Fasipp) cuestionó duramente la elección de Pulleiro, un «hombre de otra provincia», argumentando que «representa no solo un desprecio hacia los profesionales de la seguridad nativos, sino también un cambio radical y peligroso en la política de seguridad». Luis Miranda, secretario general de la Fasipp, alertó sobre un posible «endurecimiento de la función policial cotidiana y un trato hostil hacia los gremios, las organizaciones sociales y todo movimiento de protesta pacífica».
Derechos Humanos en alerta
Diversos organismos de Derechos Humanos se sumaron a las críticas, señalando que la designación de Pulleiro «representa un grave retroceso» en la materia. Argumentan que su «historial marcado por su alineamiento con posturas negacionistas y autoritarias» y su «reivindicación del Operativo Independencia» representan una amenaza para la democracia y la convivencia pacífica en la provincia. Incluso la diputada nacional Natalia Morales se pronunció en redes sociales, calificando la designación como «una provocación a días del 24 de marzo».
Pulleiro se defiende
Ante la lluvia de críticas, Pulleiro intentó calmar las aguas, afirmando que es «natural que se cuestione mi designación porque no me conocen”. El flamante ministro, quien cuenta con una extensa trayectoria militar y experiencia en empresas de seguridad privada, aseguró que ejercerá su función «con fuerte enfoque en la prevención del delito» e invitó «al personal policial a charlar». Resta por ver si sus palabras lograrán disipar las dudas y la desconfianza que su nombramiento ha generado en la provincia.
