La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) puso en marcha la Resolución General 5693/2025, publicada en el Boletín Oficial el 9 de mayo. La norma elimina 23 disposiciones burocráticas que estaban vigentes desde los años 90, principalmente vinculadas al canal rojo de verificación aduanera. El objetivo es reducir los tiempos de despacho de mercaderías, que pasarán de un promedio de 24 horas a menos de un día, y disminuir los costos asociados, especialmente para las PyMEs.
Lo más importante:
- ARCA elimina 23 trabas burocráticas que ralentizaban las importaciones desde los años 90.
- Se espera que el tiempo de verificación de mercaderías caiga de 24 horas a menos de un día.
- Los costos de despacho se reducen hasta USD 250 por contenedor, beneficiando especialmente a PyMEs.
- Respuesta a críticas internacionales sobre barreras comerciales no arancelarias.
- En San Juan, el impacto será inmediato para bodegas, mineras y comerciantes que usan el Paso Cristo Redentor.
Qué cambió exactamente
Hasta ayer, cada contenedor que caía en el canal rojo debía esperar la presencia de un veedor privado —designado por la cámara sectorial correspondiente— para presenciar la apertura y toma de muestras. Este procedimiento podía demorar entre 4 y 12 horas adicionales y generar costos de hasta USD 250 por despacho.
Con la nueva resolución, el control queda exclusivamente en manos de funcionarios aduaneros, apoyados por escáneres e inspecciones digitales, sin necesidad de intermediarios. Esto permite que la verificación física se agilice y los tiempos de espera se reduzcan significativamente.
Menos costos, más eficiencia
El cambio apunta a responder a críticas internacionales sobre las barreras no arancelarias que encarecían la importación en Argentina. Según estimaciones de ARCA, la mitad de los contenedores que antes quedaban detenidos en el canal rojo ahora serán liberados el mismo día.
El ahorro para una PyME que importa seis contenedores al año ronda los USD 1.200, suficiente para financiar un envío adicional o mejorar el flujo de caja. Además, se espera que la menor permanencia en puerto reduzca el pago de demurrage (sobrestadía), lo que también impactará en los costos de transporte.
Impacto en San Juan: bodegas y comercio exterior
En San Juan, la medida tendrá un impacto positivo para bodegas, mineras y comerciantes que utilizan el Paso Cristo Redentor para el tránsito aduanero. Eliminar la necesidad de veedores privados permitirá agilizar el movimiento de cargas, especialmente de productos sensibles como maquinaria o insumos vitivinícolas.
Según empresarios locales, el circuito logístico más previsible permitirá planificar obras con mayor certeza y disminuir el “costo puerto”, que actualmente representa entre el 3% y el 5% del valor CIF, dependiendo del tipo de carga.
Desafíos pendientes y próximas medidas
La reforma aduanera busca armonizar los controles con estándares internacionales sin relajar la fiscalización. Para eso, ARCA promete digitalizar completamente el canal rojo antes de fin de año, incorporando escáneres y reportes en la Ventanilla Única de Comercio Exterior Argentino (VUCEA).
Además, se espera que el Ministerio de Producción revise las licencias automáticas y no automáticas para evitar duplicidades y mejorar la eficiencia en la operatoria comercial.
- Plataforma 100 % digital para canal rojo. ARCA prometió que, antes de fin de año, las imágenes de escáner y los informes de inspección estarán disponibles en la Ventanilla Única de Comercio Exterior Argentino (VUCEA).
- Revisión de licencias. El Ministerio de Producción evalúa simplificar los listados de licencias automáticas y no automáticas para alinearlos con Mercosur y evitar dobles ventanillas.
- Beneficios fiscales a la electromovilidad. Se analiza ampliar el cupo de autos eléctricos a 0 % de arancel hasta 2026, siempre que las terminales locales alcancen un porcentaje de integración nacional.
Perspectivas: ¿se reflejará en precios?
Si bien la simplificación administrativa reduce costos para los importadores, el desafío será lograr que este beneficio llegue a los precios finales al consumidor. La Cancillería ya anticipa que la medida mejorará la percepción de Argentina en materia de comercio exterior, especialmente frente a Estados Unidos y la Unión Europea.
A mediano plazo, el éxito de la reforma se medirá en tiempos concretos de despacho y en la competitividad que puedan ganar las PyMEs frente a los costos logísticos actuales.