El fantasma de la Side ronda a los libertarios: Temor a las escuchas y encuentros “cara a cara”
“Por teléfono no. Tratemos de juntarnos”, fue el crudo mensaje que recibió un dirigente bonaerense de un integrante del círculo más cercano a Javier Milei, luego de varios días de intentos fallidos por iniciar una conversación.
La frase, lejos de ser una invitación a un café, resuena en un clima enrarecido. Tras la polémica que desataron las supuestas intenciones de “inteligencia interna” del Plan de la SIDE, desmentidas oficialmente, la inquietud se apoderó de la “grey libertaria”. El temor a que sus comunicaciones puedan ser objeto de intercepciones
por parte de agentes vinculados al aparato de inteligencia es un secreto a voces.
Versiones cruzadas sobre un plan polémico
Desde el Gobierno intentaron bajarle el precio a las versiones que indicaban que el contenido del demorado Plan de Inteligencia Nacional, una obligación incumplida de la ex AFI, estaría destinado a investigar a dirigentes opositores, economistas e incluso periodistas. Atribuyeron la filtración a la comisión Bicameral, presidida por el radical Martín Lousteau, que volvería a reunirse en los próximos días. Sin embargo, el tema ya reverberó entre la dirigencia política, tanto cercana como lejana al oficialismo.
En este contexto, este diario constató que varios integrantes del elenco gubernamental se quejan por las supuestas escuchas o intercepción de sus interacciones virtuales. Pero el recelo al hablar por teléfono, aseguran, no solo se vincula al espionaje, sino también a otras cuestiones más terrenales.
Denuncias de espionaje interno
Un dirigente oficialista de la Provincia, que prefirió mantener su nombre en reserva para evitar males mayores, advirtió a Clarín haber sido espiado
tras un diferendo interno. Aseguró que un actual integrante de la SIDE realizó averiguaciones sobre su actividad y que otros supuestos agentes de inteligencia habrían intentado chupar
información referente a su intimidad.
El organismo de inteligencia es conducido por Sergio Neiffert, un productor y ex funcionario de Malvinas Argentinas, ligado al padre de Santiago Caputo. Neiffert reporta directamente al integrante del llamado triángulo de hierro
y quedó en el ojo de la tormenta tras las recientes revelaciones sobre el plan de inteligencia.
“Seguro estamos olfateados todos en el Congreso”, reconoció un diputado que suele acompañar las iniciativas del Ejecutivo y no mostró sorpresa ante las denuncias sobre un supuesto espionaje interno. “Siempre se escuchan que están operando con situaciones extrañas”, agregó.
Antecedentes de recelo y control
Las denuncias sobre supuesto espionaje interno no son nuevas en la gestión libertaria. En 2024, la diputada disidente Lourdes Arrieta denunció que tras la polémica por su visita a represores en Ezeiza, cuentas de X de la militancia libertaria filtraron
la ubicación del hotel de Palermo donde se alojaba, coincidiendo con el momento en que contaba con custodia policial por una denuncia judicial relacionada con el episodio. Atribuyó el hecho a un supuesto sistema de inteligencia informal que operaría con mecanismos de saturación
en redes sociales como X.
Ese mismo año, otra diputada recibió la advertencia de un conocido: Tené cuidado porque te están ‘caminando’
. El consejo, atribuido a un alto mando del Gobierno
, pedía seguir todos sus movimientos y su situación financiera. Poco después, observó con asombro que comenzaron a circular en redes sociales fotos suyas que ella nunca había hecho públicas.
Antes de su salida, el ex jefe de Gabinete, Nicolás Posse, fue apuntado por supuestamente haber impulsado, a través del entonces titular de la AFI, Silvestre Sívori, un presunto espionaje a la ministra Sandra Pettovello (Capital Humano). La razón de la salida del ex ministro coordinador, que había diseñado los primeros planes de gobierno de LLA y contaba con el respaldo del propio Milei, nunca quedó del todo clara.
“Nadie nunca jamás le va a ganar a Néstor (Kirchner)”, bromeó un dirigente peronista bonaerense al recordar el presunto seguimiento que el ex presidente hacía sobre su propia tropa. Mauricio Macri, asimismo, también recibió denuncias por supuestamente haber sometido a ex funcionarios de Cambiemos a rigurosos controles internos. La lealtad, se sabe, es un bien escaso en el siempre cambiante escenario político.
