La inflación de junio en Argentina fue del 1,6% según el INDEC, acumulando un 15,1% en el primer semestre del año y un 39,4% interanual. El rubro con mayor suba fue Educación (3,7%), seguido por Vivienda, agua, electricidad y combustibles (3,4%). En contraste, Alimentos y bebidas no alcohólicas apenas aumentaron un 0,6%, mostrando una desaceleración. Los precios regulados lideraron las subas con un 2,2%, mientras que los estacionales mostraron una leve baja del 0,2%.
Este contenido es generado automáticamente con IA
En la novela por entregas que es la inflación argentina, el capítulo de junio trajo un respiro contenido, de esos que uno da después de subir dos pisos por escalera: necesario, pero no alcanza para festejar. El INDEC reportó una suba de “solo” 1,6%, lo cual en este país equivale a decir que “zafamos”. Si esto fuera una dieta, diríamos que el peso se mantuvo, pero el pantalón sigue sin cerrar.
La sorpresa del mes fue la Educación, que aumentó un 3,7% porque, al parecer, los colegios y universidades decidieron que el saber no ocupa lugar, pero sí cuesta más caro cada mes. Le siguieron los servicios de vivienda, que subieron 3,4% por esos simpáticos aumentos en alquileres y expensas, impulsados —en parte— por la bonificación a los encargados de edificio. Sí, hasta la portería vino con ajuste.
Mientras tanto, los alimentos —protagonistas usuales del drama— se comportaron como secundarios de lujo, con apenas un 0,6%. ¿Será el inicio de una era de paz en la góndola? No nos ilusionemos tanto: el pollo está más barato, pero la lechuga se disparó un 31,7%, confirmando que las ensaladas ahora son comida gourmet.
Eso sí, los precios regulados subieron más que nadie (2,2%), demostrando que ni con freno de mano los servicios públicos se quedan quietos. El dato curioso: los productos estacionales bajaron 0,2%, o sea que ni el invierno pudo inflar los precios de la verdulería.
Con todo esto, la inflación acumula 15,1% en el año y 39,4% en los últimos 12 meses. Si fuera una maratón, diríamos que vamos a buen ritmo… pero con una mochila llena de piedras.
Este contenido humorístico es generado por IA y puede contener imprecisiones o ser imprudente, se recomienda leer con discreción.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que en junio de 2025, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) a nivel nacional registró una suba del 1,6% respecto a mayo. En los primeros seis meses del año, la inflación acumulada es de 15,1%, mientras que en términos interanuales alcanzó el 39,4%.
¿Qué rubros subieron más?
El mayor incremento se dio en la categoría Educación (3,7%), atribuida a nuevos ajustes en las cuotas de los servicios educativos. Le siguió Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles (3,4%), impulsado por aumentos en alquileres y expensas.
Otros rubros que presentaron variaciones significativas fueron:
Recreación y cultura: 2,5%
Salud: 2,2%
Restaurantes y hoteles: 2,1%
Bebidas alcohólicas y tabaco: 2,8%
Los que menos variaron
Los aumentos más bajos se registraron en:
Prendas de vestir y calzado: 0,5%
Alimentos y bebidas no alcohólicas: 0,6%
Esto último representa una desaceleración significativa en productos de consumo básico. Dentro de este rubro, sin embargo, hubo contrastes: mientras los precios de carnes y panificados se mantuvieron estables, productos como la lechuga aumentaron un 31,7%, y el tomate redondo cayó un 21,2%.
Precios regulados, núcleo y estacionales
Al analizar por categorías, se observa que los precios regulados subieron 2,2%, el IPC núcleo (que excluye regulados y estacionales) aumentó 1,7% y los productos estacionales registraron una leve baja del 0,2%.
Variaciones regionales
Las variaciones por región fueron relativamente homogéneas, con leves diferencias:
GBA: 2,0%
Pampeana: 1,3%
Noreste: 1,1%
Noroeste: 1,2%
Cuyo: 1,0%
Patagonia: 1,8%
En el Noroeste, por ejemplo, Prendas de vestir y calzado fue la división con mayor incidencia (0,5%), mientras que en Cuyo se destacó Recreación y cultura (2,5%).
Panorama general
De acuerdo con el informe técnico, los servicios subieron más que los bienes, con una variación del 3,2% frente al 0,8% respectivamente.
Con una inflación interanual que se mantiene por debajo del 40%, el escenario muestra signos de cierta estabilización, aunque los datos aún reflejan fuertes tensiones en sectores regulados y servicios esenciales.