River se sacude el empate ante Platense y afina detalles para recibir a Instituto. Gallardo podría repetir equipo, con Bustos y Villagra listos. Mientras, siguen a Esquivel y Castaño en el mercado de pases. Además, Nasif, cedido a Banfield, mete doblete y habla de su salida de River. Se busca el «click» de Gallardo para levantar vuelo.
Después de un arranque que dejó más dudas que certezas con el empate ante Platense, River, cual boxeador que recibe un gancho al hígado, busca reponerse y enfocar todas sus energías en el duelo frente a Instituto, este miércoles en el Monumental. El equipo de Marcelo Gallardo, ese estratega que a veces nos hace acordar a un viejo zorro de la dirección técnica, tiene la posibilidad de repetir la formación, una señal de que busca darle continuidad a una idea. Fabricio Bustos y Rodrigo Villagra, dos soldados recuperados para la causa, están a disposición al 100%. Mientras tanto, en las oficinas de Núñez, siguen trabajando en el mercado de pases, con Lucas Esquivel y Kevin Castaño en el radar. ¡Aquí, todos los detalles del día a día riverplatense!
Todas las noticias de River de este martes 28 de enero
¿Qué dijo Nasif de River y de Gallardo tras su doblete a Newell’s?
Tomás Nasif, el pibe que ahora la rompe en Banfield, está viviendo un momento que ni el mejor guionista hubiese imaginado. Cedido por River hasta fin de año, ya lleva tres gritos sagrados en solo dos partidos con el Taladro. El lunes, le metió dos a Newell’s (3-0). Y claro, tras semejante actuación, los micrófonos no tardaron en llegar. «No hablé con Gallardo. Pero el club está lleno de figuras. Venir a Banfield fue una gran elección para sumar minutos y estoy feliz de estar acá», soltó Nasif, según recogieron nuestros colegas de . Una declaración que, como un buen tiro libre de Román, va directo al arco: pone en la mesa el debate sobre si se le dieron las oportunidades correctas o no. Leer más.
A darle alas: los antecedentes que tranquilizan a Gallardo para que su River despegue
Dicen que el fútbol no es ciencia exacta, pero lo de Gallardo en River es para estudiarlo. No es magia, pero a veces se le parece. A lo largo de su primer ciclo, hubo partidos puntuales donde el equipo hacía ese «click» que lo catapultaba a un nivel superlativo. Los mejores River del Muñeco, esos que nos hacían acordar a la aplanadora del 86, siempre tardaron un poco en encontrar esa velocidad crucero que los hacía imparables. Y ahora, tras el tropiezo inicial, ¿estará cerca ese despegue? La historia, como el manual de Bilardo, nos dice que la paciencia es clave, pero también que la máquina tiene que empezar a engranar ya. Leer más.
