Una discusión que escaló a tragedia
En la madrugada del domingo 1 de junio, un encuentro social en el Barrio 114 Viviendas de la localidad de Loncopué, en la provincia de Neuquén, terminó de forma trágica cuando una discusión durante un partido de truco derivó en un homicidio. La víctima, identificada como Franco Daniel Ramírez, murió tras recibir una puñalada en el pecho propinada por otro de los asistentes al encuentro.
Un asado, cartas y un arma en la cintura
Según datos aportados por el Ministerio Público Fiscal y la Policía de Neuquén, el hecho ocurrió alrededor de las 4 de la madrugada, mientras un grupo de amigos compartía una cena. Lo que en principio era una velada distendida con comida y juegos, se tornó violenta cuando una disputa entre Ramírez y el imputado escaló repentinamente. En medio del altercado, el agresor extrajo de su cintura un cuchillo de 32 centímetros y lo atacó directamente al pecho.
La puñalada fue letal. A pesar de los intentos de al menos cinco testigos por auxiliar a la víctima, Franco Ramírez falleció en el lugar, según lo confirmó la fiscal del caso, Laura Pizzipaulo. Los presentes, en estado de shock, colaboraron con las autoridades en el momento posterior al crimen.
Entrega voluntaria e inicio del proceso judicial
Tras cometer el homicidio, el agresor se presentó voluntariamente en la comisaría local, donde quedó inmediatamente detenido. El Ministerio Público Fiscal ordenó una serie de medidas urgentes, incluyendo la autopsia del cuerpo, entrevistas a los testigos, y peritajes criminalísticos en la vivienda donde ocurrió el hecho.
En la audiencia de formulación de cargos, la fiscal Pizzipaulo y la asistente letrada Margarita Ferreyra imputaron al detenido por el delito de homicidio simple y solicitaron prisión preventiva por el plazo de dos meses, fundamentando la solicitud en el riesgo de entorpecimiento de la investigación, ya que restan pericias clave y declaraciones testimoniales.
Una medida cautelar que divide opiniones
El juez de garantías Ignacio Pombo avaló la imputación, pero decidió otorgar prisión domiciliaria por 30 días, con posibilidad de revisión posterior. La resolución generó debate en la comunidad, considerando la gravedad del hecho y la conmoción provocada.
La investigación sigue en curso
Las declaraciones de los cinco testigos serán claves para reconstruir la cronología exacta del ataque. Por el momento, la Fiscalía dispuso que estas personas presten testimonio en las próximas horas bajo coordinación judicial, considerando el impacto emocional que generó la escena del crimen.
En paralelo, la Brigada de Criminalística realizó el relevamiento de la escena y secuestró el arma homicida, que será incorporada a la causa como prueba central. El hecho dejó consternada a toda la localidad, una comunidad pequeña y hasta ahora ajena a este tipo de hechos violentos.