Luego de los graves incidentes ocurridos en el partido entre Independiente y Universidad de Chile en Avellaneda, el Gobierno nacional responsabilizó al gobernador bonaerense Axel Kicillof y al presidente de la AFA Claudio «Chiqui» Tapia por lo que calificó como una «tragedia».
Fuerte cruce entre Nación y Provincia
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, acusó a Kicillof de inacción y lo calificó de «inútil» por no haber garantizado la seguridad en el estadio. «Se olvidaron de cuidar a las familias y a los hinchas de bien», escribió en su cuenta de X.
En su publicación, Bullrich también vinculó los hechos con una supuesta maniobra propagandística del gobierno bonaerense y de la AFA al promover el regreso de ambas hinchadas a los estadios, sin la preparación necesaria.
«El inútil de Kicillof se saca fotos con Tapia por puro show electoral, pero es evidente que no puede garantizar la seguridad ni cuidar a la gente», sentenció.
Comunicado oficial y advertencia judicial
El Ministerio de Seguridad nacional publicó un comunicado en el que denunció fallas graves en el operativo realizado por la Policía bonaerense y la Aprevide. Entre los puntos críticos, señalaron el ingreso violento de barras visitantes, proyectiles, destrozos y la falta de cumplimiento de las recomendaciones de la Conmebol, como la instalación de redes de contención.
Además, denunciaron que hubo una orden expresa de no intervenir a las fuerzas de seguridad antes del comienzo del partido, lo que habría permitido que la violencia se prolongara sin control.
«Esta irresponsabilidad se agrava cuando el gobernador Axel Kicillof y el presidente de la AFA deciden, de manera inconsulta, llevar adelante una acción propagandística y electoral», se lee en el comunicado.
La Nación adelantó que las fuerzas federales participarán de la causa penal que investiga lo ocurrido, al tiempo que calificaron el hecho como uno de los episodios más graves de la historia del fútbol argentino.
La respuesta de la Provincia
Desde el Gobierno bonaerense, el ministro de Seguridad Javier Alonso apuntó contra la organización del torneo, acusando a la Conmebol de priorizar la transmisión televisiva por sobre la seguridad en el estadio.
“Lo único que les importa es el espectáculo televisivo, que las tribunas estén llenas de gente para la transmisión. Ellos no aceptan tribunas vacías, a pesar del peligro”, expresó.
Mientras las responsabilidades se cruzan de lado a lado, lo cierto es que el operativo de seguridad falló estrepitosamente, y la violencia volvió a colarse por la puerta principal del fútbol argentino.
