La Sub-20 de Argentina tuvo un debut soñado en el Sudamericano, metiéndole tres pepazos a Brasil en los primeros diez minutos. Subiabre, Echeverri y Ruberto fueron los verdugos de la canarinha, con una presión alta que dio resultado y un par de jugadas que dejaron a los defensores rivales como conos.
La Selección Argentina Sub-20 arrancó el Sudamericano 2025 con una actuación que hizo temblar a más de uno. En el clásico contra Brasil, el equipo de Diego Placente no se guardó nada y en solo diez minutos ya ganaba 3-0. Una ráfaga de goles que dejó a la canarinha sin aliento, y a nosotros con la mandíbula en el piso. Los responsables de esta fiesta de goles fueron Ian Subiabre, Claudio Echeverri y Agustín Ruberto, todos ellos con pasado y presente en River Plate, haciendo honor a la rica historia del club.
El debut en el torneo, disputado en Venezuela, tenía un condimento especial: un clásico sudamericano contra Brasil. Pero los pibes argentinos salieron a la cancha con la convicción de que no había lugar para especulaciones. Y así fue como, en un abrir y cerrar de ojos, la pizarra se movió a favor de los nuestros.
Una presión alta que desató la tormenta
La presión alta de Maher Carrizo y Valentino Acuña fue la clave para robar la bocha cerca del área rival. Un desborde de Acuña por la derecha y su posterior centro encontraron a Subiabre, quien no perdonó y puso el 1-0 al minuto seis. ¡Qué manera de empezar un clásico!
Ian Subiabre puso el 1-0 de la Selección Argentina ante Brasil
Pero la cosa no quedó ahí. Apenas dos minutos después, la misma fórmula pero con diferentes apellidos: Acuña volvió a robar la bocha cerca del área rival, dejándola en los pies de un Echeverri que demostró por qué lo apodan «el Diablito». Gambeta en mano, se metió en el área y sacó un latigazo que dejó sin chances al arquero brasileño. 2-0 en el marcador y la sensación de que la noche era albiceleste.
Claudio Echeverri puso el 2-0 de la Selección Argentina ante Brasil
La frutilla del postre
Pero faltaba la frutilla del postre, y llegó gracias a otra recuperación de balón, esta vez en campo propio. Dylan Gorosito metió el pie, Acuña asistió y Echeverri centró para que Ruberto, con toda la furia de un 9 de raza, la mandara a guardar. Con este gol, la selección argentina selló un inicio de partido para el recuerdo: tres goles en once minutos. Una demostración de poderío que no dejó dudas sobre el nivel de los pibes.
Agustín Ruberto puso el 3-0 de la Selección Argentina ante Brasil
Con este arranque, la Selección Argentina Sub-20 demostró que tiene con qué pelear por el título. Veremos qué sigue en este Sudamericano, pero una cosa es segura: estos pibes prometen dar que hablar.
