Racing cayó en casa ante Atlético Bucaramanga por la Copa Libertadores y Gabriel Arias, capitán de la Academia, reconoció el golpe duro pero confía en revertir la situación. La ausencia del público por sanción de la CONMEBOL también fue un factor clave según el arquero.
10/04/2025 21:49hs.
¿Se pinchó el globo? Racing y una derrota que duele en el alma
La derrota contra Atlético Bucaramanga en la Copa Libertadores pegó como patada de mula en el mentón. Y no es para menos, che. Primera vez que el Racing de Costas pierde de local en un torneo internacional. Un papelón que nos hace acordar a los peores momentos del Apertura, lejos del equipo copero que nos ilusionaba. Parecía que estábamos viendo al Racing de Mostaza Merlo en sus peores épocas… ¡Un desastre!
Y como no podía ser de otra manera, el que puso la cara fue Gabriel Arias, el capitán, el caudillo. Llegó medio rengo con esa lesión intercostal, pero Costas, con la fe del Chamán, se la jugó igual. ¿Le salió bien la apuesta? Mmm… digamos que no tanto.
Arias, la autocrítica del capitán y la sombra del Cilindro vacío
«Fue inesperada la caída porque veniamos de hacer un gran partido en Brasil y veniamos bien. Hoy nos costó encontrar los espacios…”, arrancó Arias, con la sinceridad de un tipo que sabe que la macaneó. Y sí, Gaby, hasta mi abuela vio que Bucaramanga les cerró el camino como si fuera la defensa del Bayern Munich del 2013. “Ellos hicieron un gran planteo”, reconoció el arquero, como si fuera un relator deportivo relatando otra realidad. ¿Será que vio otro partido?
Copa Libertadores –
El resumen de la derrota de Racing ante Bucaramanga
Pero Arias no se quedó ahí. Habló del Cilindro vacío, de la sanción de la CONMEBOL… “No es excusa pero se sintió la ausencia de la gente. Son raros estos partidos a puertas cerradas…”, tiró el uno. Y sí, Gaby, ¿quién no extraña el aliento de la gente? Es como jugar un Boca-River sin público, o un partido de la Scaloneta con la cancha vacía… ¡Un embole!
Mirando hacia adelante: ¿Aldosivi, la cura para todos los males?
Más allá del bajón, Arias sabe que esto recién empieza. “Hay que seguir”, dijo, con la mentalidad ganadora de un tipo que comió banco con Pizzi. Y ahora, con Aldosivi en el horizonte, Racing tiene la chance de levantar cabeza. ¿Será el Tiburón el rival ideal para reencontrarse con la victoria? Habrá que ver si los muchachos de Costas la tienen clara o si siguen con la pólvora mojada. Porque si juegan como contra Bucaramanga… ¡mamita querida! Estamos para el descenso.
