El sueño Monumental de Castaño: debut con sabor agridulce en River

Redacción Cuyo News
4 min
Cortito y conciso:

Kevin Castaño debutó en River en el Monumental con un agridulce empate contra Rosario Central. El colombiano mostró destellos de su talento, pero también algunas falencias por corregir. La hinchada, impaciente, pide resultados tras la millonaria inversión en el jugador.

El debut soñado, con sabor a poco: Castaño se puso la banda

«Soy hincha de River desde niño. Es un sueño muy grande para mí. A muerte con estos colores». Con estas palabras, Kevin Castaño anticipaba lo que sería su debut con la camiseta de River. Y aunque la noche del 29 de marzo de 2025 en el Monumental quedará grabada a fuego en su memoria, el empate 2-2 contra Rosario Central dejó un sabor agridulce.

A los 18 minutos del segundo tiempo, el Muñeco Gallardo, cual director técnico sacando un as bajo la manga –casi como Mostaza Merlo con el Bambino Veira en Racing–, mandó a la cancha al colombiano en lugar de Rodrigo Aliendro. A pesar de haber llegado hacía poco de la fecha FIFA con Colombia, donde jugó poco y nada –casi como el Beto Alonso en un partido de verano–, Castaño entró con la misión de darle más picante al mediocampo Millonario.

Castaño: ¿Un crack en potencia o un Villagra 2.0?

En la media hora que estuvo en cancha, el volante mostró algunos toques de calidad, como un remate que casi termina en gol y un centro de novela que conectó Pezzella –cabezazo que se fue apenas desviado, al estilo Palermo en un mano a mano–. Sin embargo, también evidenció algunas falencias: cuatro pelotas perdidas que, por suerte para River, Central no supo capitalizar. Un 85% de precisión en los pases suena lindo, pero esas pérdidas… ¿nos hacen acordar a alguien? Sí, a Rodrigo Villagra y su paso en falso por Núñez.

Recordemos que la llegada de Castaño no fue moco de pavo. River puso 13.8 millones de dólares –¡una fortuna! Casi como si hubiesen comprado al Diego en su mejor momento–, convirtiéndolo en la segunda compra más cara de la historia del club. La presión por rendir es enorme y la hinchada, como siempre, está expectante. ¿Podrá Castaño bancarse la parada o terminará como otro refuerzo que promete y no cumple?

Silbidos en el Monumental: la paciencia tiene un límite

El empate contra Central no cayó bien en el Monumental. Los silbidos al final del partido fueron un claro mensaje para el equipo y para el propio Castaño. La hinchada, como la del Lobo en los 90 con el Turco Mohamed, quiere ganar, y la Libertadores está a la vuelta de la esquina. «En la copa, cueste lo que cueste…», cantaban los hinchas, dejando en claro que la paciencia se está agotando. El tiempo dirá si Castaño está a la altura del desafío.

Compartir

🔺 Tendencia

🔺 Tendencia