Nasif se luce: golazo y debut soñado en Banfield ante Defensa

¡Qué noche, señores! Tomás Nasif, ese pibe que pintaba para crack en la Reserva de River, se mandó un debut de aquellos con la camiseta de Banfield. En Florencio Varela, y por la primera fecha del torneo Apertura, el muchacho clavó el 1 a 0 ante Defensa y Justicia. ¿El dato? ¡Ocho goles en 23 partidos el año pasado en la Reserva! Y encima, uno a Boca. Este pibe tiene pasta de crack.

Con la 30 en la espalda, Nasif encaró a lo grande. Recibió un pase de Bizans, amagó con clase ante Ferreira, y después de un rechazo del arquero, no perdonó. ¡Golazo! La emoción del pibe era palpable, casi se le escapan las lágrimas. Una noche de esas que se guardan en el corazón, de esas que te hacen creer que el fútbol es el mejor deporte del mundo.

Esto sucede justo cuando a Marcelo Gallardo le preguntan si no le da bola a los pibes. «Soy un entrenador que le dio posibilidades a los jugadores de la casa: no confundamos a la gente con el mensaje de que no quiero darles lugar, no es por ahí», dijo el Muñeco, en clara y concisa demostración de que no se casa con nadie.

El Muñeco también dejó claro que «Hay momentos para que jueguen determinados futbolistas y otros para que sigan aprendiendo: me puedo equivocar, pero intento respetar los procesos». Palabras de un tipo que sabe lo que dice, aunque a veces nos haga dudar con algunas decisiones.

Ojo, que Nasif vuelve a River a fin de año, eh. La cesión es sin opción, como para que los hinchas del Taladro se ilusionen… y se desilusionen a la vez, porque la tienen difícil. Encima, hay una cláusula de repesca a favor del Millo. Si el técnico lo pide, vuelve antes. Y la rescisión, ¡agárrense!, es de 30 millones de euros. Un precio para pocos, diría el Bati en sus tiempos de gloria.