Oswaldo Balanta, jugador colombiano a prueba en San Lorenzo, muestra una recuperación alentadora tras sufrir un paro cardíaco en un entrenamiento. Publicó una foto en Instagram con la camiseta del Ciclón, agradeciendo el apoyo recibido.
Balanta se recupera: La vuelta del gladiador
El delantero colombiano Oswaldo Balanta, que nos tuvo a todos con el Jesús en la boca tras el paro cardiorrespiratorio que sufrió durante una práctica de la Reserva de San Lorenzo, viene evolucionando a pasos agigantados, como si fuera el mismísimo Diego resucitando en cada gambeta. Los partes médicos son cada vez más esperanzadores y su recuperación es un golazo de media cancha para el mundo del fútbol.
De la clínica a Instagram: Balanta dice presente
Y como prueba de que está para jugar los 90 minutos (bueno, quizás todavía no), el sábado el pibe de 23 años reapareció en su cuenta de Instagram. ¡Un pase magistral a las redes sociales! Posteó una foto desde la Clínica Finochietto, luciendo la 9 de San Lorenzo como un verdadero crack. «Poco a poco con la recuperación», escribió, con la humildad de un campeón que sabe que lo importante es el equipo. «Gracias a todos», cerró, reconociendo el apoyo de la hinchada que lo bancó en las malas. La imagen lo muestra junto a su representante, que seguramente debe estar más contento que Menotti en el 78.
El susto que paralizó al Ciclón
Recordemos que Balanta, quien llegó a Boedo a probar suerte tras un tiempo sin club, se desplomó en pleno entrenamiento el 26 de marzo. Una jugada que nadie esperaba y que nos dejó a todos helados. Los médicos del club, dignos de un premio Nobel por su rápida reacción, le realizaron RCP y lo mandaron de urgencia al Hospital Piñero. De ahí, lo derivaron a la Finochietto donde, como un verdadero guerrero, sigue dando pelea. Balanta estaba entrenando con la Reserva, buscando una chance para sumarse al plantel profesional cuando abriera el libro de pases. ¿Se imaginan la película si después de todo esto termina metiendo el gol del campeonato? Sería una historia digna de Hollywood, una remontada épica como la del Liverpool contra el Milan en Estambul.
Ojalá que esta historia tenga un final feliz, como el del Chavo del 8 encontrando su torta de jamón. Porque en el fútbol, como en la vida, lo importante no es solo ganar, sino también levantarse después de cada caída. Y Balanta, con la garra charrúa -aunque sea colombiano- que lo caracteriza, está demostrando que tiene pasta de campeón.
