Platense se llevó un triunfo ajustado ante Vélez en Liniers, en un partido caliente que desató la furia de Sebastián Domínguez. El DT de Vélez criticó duramente al árbitro y a la forma de jugar de Platense, a lo que Sergio Gómez respondió con una frase picante: «En mi barrio las cosas se arreglaban de otra forma». Además, Mateo Pellegrino abandonó la concentración de Vélez antes del partido, generando aún más tensión en el club.
La fecha dejó un sabor amargo en Liniers. Platense, ese equipo que te hace acordar a los viejos tiempos del fútbol aguerrido, se llevó tres puntos de oro ante un Vélez que no levanta cabeza. Sí, señores, el Calamar se impuso por la mínima en un partido que tuvo de todo: polémicas, un campo de juego que parecía un potrero y declaraciones que seguramente darán que hablar en los próximos días.
El encuentro, que se disputó en el José Amalfitani, estuvo lejos de ser un ejemplo de buen fútbol. El terreno de juego, en condiciones deplorables, complicó el desarrollo del partido y, según el DT de Vélez, Sebastián Domínguez, fue un factor determinante en la derrota de su equipo. El ex defensor central, con la sangre caliente, no se guardó nada y le apuntó con todo al árbitro, Andrés Merlos, y a la dupla técnica de Platense, Sergio Gómez y Favio Orsi, a quienes acusó de no intentar jugar al fútbol.
«En mi barrio las cosas se arreglaban de otra forma»: la respuesta de Sergio Gómez
Pero la reacción del «Negro» Gómez, fiel a su estilo, no se hizo esperar. En conferencia de prensa, el técnico del Calamar le respondió con una frase que resonó en el ambiente futbolero y que nos hace acordar a las épocas de los «mano a mano» a la salida del vestuario. «En mi barrio las cosas se arreglaban de otra forma«, disparó Gómez, dejando claro que no se achica ante las críticas. Y, claro, uno se pregunta: ¿A qué barrio se referirá el Negro? ¿Será uno de esos barrios donde el fútbol se vive con pasión y los códigos son sagrados, al estilo de un potrero con aroma a asado?
Además de esa frase explosiva, Gómez defendió el planteo de su equipo y le respondió con elegancia a Domínguez: «Es fácil enojarse acá, pero nosotros siempre nos mantenemos humildes«. También destacó el mérito de la victoria y se mostró orgulloso de su trayectoria junto a Orsi: «Somos dos tipos del Ascenso que hace 14 años dirigimos y todo lo que recorrimos fue todo mérito». Una declaración que le pone un condimento extra a esta historia, porque todos sabemos que el fútbol argentino es una caldera y los trapitos sucios se lavan en la cancha, o fuera de ella.
El «Negro» también se encargó de meterle otro dardo al nuevo DT de Vélez, asegurando que «el triunfo fue totalmente merecido, y de hecho, pudimos haberlo sentenciado antes con el penal«. Con esta frase, el entrenador de Platense le puso sal y pimienta a la polémica, que seguramente tendrá más capítulos en los próximos encuentros entre estos dos equipos.
Seba Domínguez y su fastidio en Liniers.
Por su parte, Sebastián Domínguez, con la frustración a flor de piel, se quejó del estado del campo de juego y de la supuesta falta de intenciones de Platense por jugar: «Aun así, no fue un partido parejo, fuimos el único equipo que intentó jugar en esta cancha«. Además, le apuntó al árbitro Merlos, pidiendo la expulsión de un jugador del Calamar por doble amarilla: «Estoy convencido de que Saborido tendría que haber sido expulsado«.
El flamante entrenador de Vélez no ocultó su enojo por las dos derrotas consecutivas en el inicio del torneo. «Estoy caliente y preocupado por los dos partidos sin sumar«, aseguró y agregó dejando la espina clavada: «Estaríamos hablando de otra cosa si Platense se quedaba con uno menos desde los 30 minutos». Un reclamo que, seguramente, generará más debate y polémicas.
Para ponerle más picante a esta historia, antes del partido Mateo Pellegrino, que tuvo un pasado reciente en Platense, abandonó la concentración de Vélez por diferencias con la dirigencia por una oferta que no fue aceptada.
Mateo Pellegrino busca irse de Vélez.Prensa Vélez
En fin, un partido que dejó más tela para cortar que buen fútbol, pero que nos recuerda que en el fútbol argentino, la pasión y las chicanas son parte de la esencia. Y como diría el gran Eber Ludueña, esto recién empieza, así que acomodate en el sillón que se vienen más emociones en el fútbol criollo.
