River logró su primera victoria en el Apertura 2025 tras vencer 1-0 a Instituto con un gol de Montiel sobre el final. Un penal reclamado por una mano en el área cordobesa generó polémica, pero el árbitro Falcón Pérez desestimó la infracción al considerar que la mano no fue intencional ni amplió el volumen del cuerpo.
Y llegó el desahogo en el Monumental. River, después de un debut esquivo ante Platense, consiguió su primera victoria en el Apertura 2025. El equipo de Gallardo superó con lo justo a Instituto por 1 a 0, gracias a un gol de Gonzalo Montiel en el epílogo del partido. Pero, ¿qué sería de una fecha sin polémica? Un cruce en el área desató el clamor de la hinchada millonaria que pidió penal a gritos al ver una mano que, a criterio del juez, no ameritaba cobro.
La jugada del debate tuvo como protagonista a Sebastián Driussi, quien dentro del rectángulo mayor, buscó controlar una pelota incómoda con su zurda. El esférico cambió de dirección y terminó impactando en el brazo de Alarcón, defensor del equipo cordobés. El jugador, al sentir el roce, inmediatamente recogió su extremidad y la llevó hacia atrás de su cuerpo. Si bien la pelota quedó «muerta» en una zona peligrosa, no fue producto de un remate directo ni llevaba potencia que desafiara al arquero.
River Plate –
El reclamo de River por mano en el área del jugador de Instituto
¿Penal o no penal? La polémica del partido
El reglamento, ese manual indescifrable para muchos, dicta que una mano en una posición «natural», donde el jugador intenta evitar el contacto ante un balón que llega a escasos metros, sin intención de ampliar el volumen del cuerpo, no debe sancionarse. Y así lo interpretó Yael Falcón Pérez, el juez del partido, desatando la bronca en el Monumental y seguramente alguna que otra discusión en los grupos de Whatsapp. Una decisión que, como siempre, generará un sinfín de opiniones encontradas.
Como diría el “Maestro” Tabárez: «El fútbol es el deporte más injusto que hay». Y para los hinchas de River, esta jugada no hizo más que confirmar esa máxima. ¡Pero tranquilos, muchachos! Que el fútbol siempre da revancha. Y este triunfo ajustado puede ser el punto de partida para que el equipo de Gallardo levante vuelo y los goles lleguen por si solos, sin necesidad de polémicas arbitrales.
