Kudelka, DT de Huracán, tiró flores para todos lados después del triunfazo histórico contra Corinthians en Brasil. Lo comparó con la final del Intercontinental del 67 (bueno, no tanto) y dijo que superaron al Timao estratégicamente, como si fuera Menotti en el 78.
Kudelka y el batacazo del Globo en Brasil: ¿Una obra maestra táctica?
Huracán arrancó la Copa Sudamericana con una victoria que quedará en los libros: 2-1 contra Corinthians en su propia cancha, el Neo Química Arena. Un doblete de Leo Sequeira, que se vistió de Mostaza Merlo en sus mejores épocas, le dio el primer triunfo al Globo en tierras brasileñas en toda su historia. Y claro, Frank Darío Kudelka, el DT, infló el pecho como paloma en plaza de Mayo.
«Idealizamos un partido como el que se dio. Lo pergeñamos, lo entrenamos… a veces sale y a veces no, pero hoy salió ante un rival muy encumbrado», arrancó Kudelka, con una humildad digna de Mostaza Merlo, pero con un vocabulario más florido. Y después tiró la bomba: «Creo que estratégicamente y estructuralmente los superamos». ¿Lo habrá dicho en serio o estaba practicando para comentarista en la tele?
¿El Globo candidato?
Para Kudelka, ganarle a un grande de Brasil como Corinthians, que venía de ser campeón paulista (el equivalente al torneo local), es como ganarle al Real Madrid en la final de la Champions. «Le doy valorización extrema a eso… los jugadores estuvieron no solo a la altura, sino desafiantes de la oportunidad», afirmó el DT. ¿Estará pensando en grande o se le fueron los humos a la cabeza? Habrá que ver si el Globo puede mantener este nivel, porque si no, Kudelka va a tener que cambiar el discurso y volver a la humildad que lo caracteriza (?).
Un triunfo para ilusionarse… ¿o para relajarse?
El triunfo en Brasil es un envión anímico importante para Huracán, que también viene bien en el torneo local. La pregunta es: ¿servirá para consolidar el proyecto o para que se les suba el éxito a la cabeza como a Passarella en el 98? El tiempo lo dirá. Lo que está claro es que este Huracán, con Kudelka a la cabeza, está dando que hablar, para bien o para mal. Y eso, en el fútbol argentino, ya es mucho decir.
