Fernández niega las acusaciones de Yañez y apunta contra el juez Ercolini
El expresidente Alberto Fernández rechazó categóricamente las acusaciones de violencia de género formuladas por la exprimera dama Fabiola Yañez, luego de ser procesado en la causa. En declaraciones radiales, Fernández aseguró que «es falso todo lo denunciado» y cuestionó la imparcialidad del juez Julián Ercolini, a cargo del caso.
Fernández manifestó tener «una enemistad» con Ercolini, a quien denunció por el Caso Lago Escondido y cuyo accionar en la Universidad de Buenos Aires también ha criticado. El exmandatario destacó el voto en disidencia del camarista Roberto Boico, quien se opuso a su procesamiento, calificando sus argumentos como «una pieza académica maravillosa». Fernández expresó su confianza en que «alguien en la Justicia ya empezó a advertir lo que vengo planteando hace mucho tiempo».
La versión de Fernández sobre los moretones y la intervención estética
En cuanto a la imagen de Yañez con un moretón en el ojo, que forma parte de la acusación, Fernández sostuvo que existen testigos que afirman que Yañez «se caía, se lastimaba, se llenaba de moretones por los golpes y se sacaba fotos diciendo que algún día las iba a usar». Además, insistió en que la lesión fue producto de una intervención estética, negada inicialmente por Yañez, y que él mismo le preguntó sobre la marca en su ojo la mañana posterior al procedimiento. «Ese ojo negro nunca existió y nunca nadie lo vio. No hay un solo testigo», aseveró.
Problemas de salud, denuncias cruzadas y la situación con su hijo
Fernández también hizo referencia a «problemas crónicos de salud muy serios» de Yañez que, según él, «explican todo esto». Profundizó al mencionar «una enfermedad psiquiátrica de la cual deriva una adicción», evitando dar más detalles por respeto a la madre de su hijo. El expresidente reveló que ha presentado una denuncia por «falso testimonio agravado» contra Yañez y que la denuncia original «le sirvió mucho al Gobierno para ensuciarme, para descalificarme socialmente y públicamente». Finalmente, Fernández se refirió a las dificultades para ver a su hijo Francisco, quien reside en Madrid con su madre, expresando preocupación por el estado de Yañez y la distancia que lo separa del menor.
