Acuerdo en ciernes: Milei y Macri acercan distancias en la Provincia de Buenos Aires
Los movimientos recientes entre Javier Milei y Mauricio Macri marcan un claro intento por aproximar La Libertad Avanza (LLA) y el PRO con la mirada puesta en una alianza electoral en la Provincia de Buenos Aires. La semana próxima, se anticipa un encuentro clave que buscará consolidar este acercamiento.
Cristian Ritondo y Diego Santilli, figuras relevantes del PRO, tienen previsto reunirse por primera vez tras los comicios porteños con Sebastián Pareja, titular del partido libertario en la provincia, con la alta probabilidad de que se sume Karina Milei. Este gesto, que rememora la última visita de los diputados a Casa Rosada en marzo –ocasión en la que también participó el Presidente–, apunta a escenificar la confluencia política.
El propio Presidente Milei ratificó la intención de ir ‘juntos con el PRO’ en una reciente entrevista, donde afirmó que le ‘daremos una paliza (al kirchnerismo) en las urnas en septiembre, en octubre y en 2027 le vamos a ganar la Provincia’. La declaración llegó tras una cena privada en Olivos con Ritondo, un encuentro de dos horas donde, según trascendió, compartieron un menú modesto y evitaron las bebidas alcohólicas. La agenda, naturalmente, incluyó las elecciones provinciales del 7 de septiembre y las nacionales del 26 de octubre. Al respecto, el presidente del PRO bonaerense sostuvo: ‘Tenemos en claro que hay que ganarle al kirchnerismo en las elecciones, y estamos en un buen camino en ese sentido’.
El formato del acuerdo: entre frentes y boletas violetas
A pesar del optimismo presidencial y la inminente foto, el formato exacto de la confluencia electoral aún genera interrogantes. Algunos referentes libertarios reconocieron que los dichos del Presidente los tomaron por sorpresa, indicando que ‘no era la directiva con la que estábamos trabajando’.
No obstante, en los círculos cercanos tanto a Milei como a Macri, quienes intercambiaron mensajes recientemente, la opción más viable parece ser la conformación de un frente electoral en septiembre y la presentación de una boleta con fuerte impronta libertaria en octubre. La puja por el nombre del espacio se vislumbra como secundaria; Karina Milei, líder indiscutida de LLA, no mostraría intención de resignar ni ocultar la marca que hoy goza de mayor adhesión.
Una de las aristas de negociación reside en la posible incorporación de los sectores radicales liderados por el senador Maximiliano Abad. Mientras el PRO impulsa esta sumatoria, los delegados de Karina Milei manifiestan reticencias, argumentando que los votos que aportarían no serían significativos. Señalan que, de los 26 municipios gobernados por la UCR bonaerense, 8 responden al armado de Facundo Manes, quien recientemente ‘terminó de dar un portazo’ al centenario partido. El caso de Balcarce, el municipio más relevante bajo el liderazgo de Abad, es citado como ejemplo de su limitada representatividad provincial, que asciende a ‘apenas el 3.55 por ciento’ del electorado.
El peso de los intendentes y las estrategias territoriales
La dinámica de la alianza se compara, con cierto sarcasmo, con la configuración histórica de Juntos por el Cambio, donde ‘ahora LLA es el PRO, el PRO es la UCR y la UCR es la Coalición Cívica’. La pregunta que resuena entre dirigentes cercanos a la hermana del Presidente es si aquellos que hoy aspiran a sumarse ‘¿Se van a bancar ser la Coalición Cívica?’.
Tanto referentes macristas como mileístas dan por desfavorable la elección provincial en la tercera sección electoral, sin importar la eventual candidatura de Cristina Kirchner. Los resultados en las comunas del sur de la Ciudad de Buenos Aires, tradicionalmente peronistas, anticipan esa dificultad. La primera sección, que abarca el norte y oeste del Gran Buenos Aires, se presenta como un escenario de resultado abierto y crucial para las aspiraciones de la alianza en octubre, concentrando en ambas secciones cerca de ‘4.5 millones de votos’.
La lectura de los resultados de septiembre no será tan definitoria como en octubre. La estrategia, según un dirigente que ha abogado por el acuerdo entre PRO y LLA, implica la necesidad de ‘9 candidatos: ocho para septiembre y uno para octubre que sea bueno, aunque el candidato de fondo sea Milei’.
El peronismo, en tanto, se inclina por presentar figuras de peso en las ocho secciones electorales. De esta manera, fuerzas como Cristina Kirchner, La Cámpora, Axel Kicillof, los intendentes y Sergio Massa consideran arriesgar nombres propios. Se menciona el caso del intendente de La Plata, Julio Alak, como posible candidato en la octava sección, aunque desde su entorno se rechaza esa hipótesis.
En esa misma lógica, oficialistas y aliados impulsan la candidatura del intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro, en la quinta sección, y la de Diego Santilli en la estratégica primera sección. No obstante, Santilli ‘se resiste’ –manteniendo, además, una distancia de ‘tres meses que no habla con Macri’– y vislumbra una posición expectante en la boleta nacional de octubre, especialmente ante la posibilidad de que Cristina opte por esa vía. Milei, por su parte, sigue sosteniendo que su candidato es José Luis Espert, a pesar de que a Karina ‘no la convenza. O, peor aún, aunque lo aborrezca’.
Los coletazos del triunfo de LLA en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se hacen sentir. En el grupo de intendentes alineados con Patricia Bullrich, quien ahora es ‘flamante afiliada libertaria’, reclaman un ‘trato preferencial’ respecto a quienes permanecen en el PRO. ‘Vinieron con la escupidera’, expresó, enardecido, un referente de ese espacio.
El caso de Ramón Lanús en San Isidro es particular. A pesar de su total alineación con la ministra de Seguridad, enfrenta mayores obstáculos con el bloque de concejales de LLA que con el kirchnerismo. En su gabinete, trabaja Pablo de la Torre, ex funcionario expulsado del Ministerio de Capital Humano con ‘una denuncia penal por corrupción’. Su hermano, Joaquín de la Torre, referente en San Miguel, ‘rompió el mes pasado el bloque de senadores’ de LLA en la legislatura provincial y explora un armado político con intendentes como Julio Zamora de Tigre y Fernando Gray de Esteban Echeverría, entre otros, sin visos de retorno al espacio libertario.
Un integrante de la mesa chica de Mauricio y Jorge Macri resalta el peso de los intendentes radicales y del PRO en una potencial alianza, justificándolo en la aparente ‘armado débil de LLA en el interior bonaerense’. Un macrista con inclinaciones hacia el espacio libertario recuerda que el PRO solo gobierna 13 de los 135 municipios y cuenta con escasa presencia libertaria.
En paralelo, los delegados de Santiago Caputo en la Provincia, el presidente del bloque de diputados provinciales de LLA Agustín Romo y el secretario de Culto Nahuel Sotelo, se atreven a ‘desafiar el armado de Pareja y Karina Milei’, quienes buscarían limitarlos al ámbito de la comunicación en redes. Estos integrantes de ‘Las Fuerzas del Cielo’ encabezaron un acto militante en Burzaco, Almirante Brown, señalando que ‘Están pataleando por un lugar en las listas y está muy bien’, según analizan en uno de los vértices del núcleo de poder.
En el plano de las candidaturas, la hermana del Presidente ‘se aleja de una posible derrota’ en Misiones, ‘acusó gripe’ para justificar su ausencia en el acompañamiento al candidato libertario, el ex tenista Diego Hartfield. En su lugar, asistió Martín Menem, vicepresidente del partido, quien optó por Puerto Iguazú en detrimento de Posadas. Patricia Bullrich, que tenía previsto viajar el lunes, suspendió su agenda.
De cara a octubre, los sectores más afines a Milei comparan la elección nacional bonaerense con la de 2013, en la que se dio una ‘adhesión’ del PRO a la boleta oficialista, pero con una neutralización de su propia candidatura. Un dirigente que participó en esas negociaciones entre Macri y Massa recuerda la dificultad de replicar ese acuerdo, que ‘Implicaba que ellos no presentaran candidato en la Ciudad; y acá ya no se cumplió’.
En caso de prosperar el acuerdo, el 26 de octubre se daría la confluencia de PRO y LLA en una boleta en la Provincia, mientras competirían frontalmente del otro lado de la Avenida General Paz.