¿Golpe de estado frustrado o marcha de jubilados con pirotecnia premium? Bullrich denuncia un plan macabro para derrocar al gobierno con facas, tumberas y… ¿miguelitos? Parece que la oposición se olvidó el tanque esta vez.
Mientras tanto, el Chiqui Tapia jura que no fue él, que él estaba en contra. ¿Será que los barras se organizaron solos por WhatsApp? Misterios que Bullrich promete resolver con identificación facial y leyes más duras que el asado de la abuela.
¿Y la justicia? Esperando ansiosa las pruebas, como nosotros esperando el feriado largo. Al final, la única certeza es que el que las hace, las paga… en cuotas, con intereses y seguro de desgravamen.
Bullrich: «Vinieron preparados para matar»
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, acusó a grupos violentos con motivaciones políticas de orquestar los disturbios ocurridos durante la marcha en el Congreso. «Vinieron preparados para matar», sentenció la funcionaria en declaraciones a LN+, señalando la presencia de armas de fuego, armas blancas y miguelitos entre los manifestantes.
Bullrich describió la situación como un intento de «tomar el Congreso» y derrocar al gobierno. Aseguró que los incidentes fueron protagonizados por una «mezcla de narcopolítica», compuesta por barras bravas financiados por «intendentes y dirigentes sindicales», que se infiltraron en una protesta de jubilados.
Demanda y Ley Anti-barras en el horizonte
La ministra anunció que se presentarán demandas por «daños y violencia extrema», con el objetivo de que «el que las hace las paga». Los equipos jurídicos del Ministerio de Seguridad ya se encuentran trabajando en la elaboración de las denuncias que incluirían diversas figuras penales.
Además, Bullrich anticipó la inminente presentación de una «Ley Anti-barras» que busca la «prohibición total y absoluta» de las barras bravas, declarándolas asociaciones ilícitas. La propuesta incluiría la penalización de dirigentes involucrados en estas organizaciones.
El rol del «Chiqui» Tapia y la AFA
En relación a la participación de barras bravas en la marcha, Bullrich mencionó que Claudio «Chiqui» Tapia, presidente de la AFA, se comunicó con representantes de la comisión de fútbol del gobierno para expresar su rechazo a los hechos de violencia.
La ministra también condenó el ataque a periodistas que cubrían la marcha y se preguntó: «¿Quién le paga a estas barras bravas a venir a generar este nivel de violencia?». Bullrich concluyó afirmando que desde el gobierno impulsarán «leyes más duras» para combatir la violencia y «que la justicia encuadre a todos estos detenidos y nos permita la identificación facial de los que estuvieron en la marcha».