Irán está en crisis, pero su exvice, Shahram Dabiri, estaba de shopping en Patio Olmos. Un viaje de lujo a Argentina que incluyó Ushuaia y la Antártida desató la furia del presidente iraní y pedidos de informes en el Congreso argentino. ¿Cómo pasó desapercibido un vicepresidente «buscado», no por Interpol, sino por las redes sociales de su esposa? El misterio de la visa de turista y el silencio de la SIDE. La pregunta del millón: ¿quién le recomendó Bariloche en Semana Santa?
Dabiri se defendió: «No cometí ningún error», dijo, con la misma cara que uno pone cuando te descubren comiendo el último alfajor. Mientras tanto, su esposa cerró sus redes sociales, demostrando que a veces la mejor defensa es un buen apagón digital. El exvice se fue, pero dejó la duda: ¿Argentina, tierra prometida para las vacaciones secretas de funcionarios en problemas?
El escándalo del vicepresidente iraní de vacaciones en Argentina
La difusión de fotos del exvicepresidente iraní, Shahram Dabiri, vacacionando en Argentina desató un escándalo internacional. La noticia provocó su destitución en Irán por realizar un viaje de lujo en medio de una crisis económica y generó interrogantes en Argentina sobre cómo obtuvo una visa de turista y por qué los servicios de inteligencia no alertaron sobre su ingreso.
Un viaje de lujo que terminó en destitución
Dabiri ingresó al país el 20 de marzo con visa de turista, declarando ser médico y omitiendo su cargo público. Recorrió Buenos Aires y Ushuaia, donde abordó un crucero a la Antártida. Las fotos de su esposa en redes sociales expusieron el viaje, lo que llevó a su destitución el sábado por el presidente Masud Pezeshkian. El mandatario iraní criticó el viaje por considerarlo «indefendible e injustificable» dada la situación económica del país.
Interrogantes en Argentina y pedidos de informes
El caso Dabiri generó preocupación en el Congreso argentino, donde se presentaron pedidos de informes para investigar cómo el exfuncionario obtuvo la visa y si hubo fallas en los controles de seguridad. La oposición cuestiona la falta de alertas por parte de la SIDE, considerando que Irán es un país «observado» por los atentados a la Embajada de Israel y la AMIA. Diputados como Maximiliano Ferraro exigen explicaciones al Gobierno sobre los protocolos de seguridad y la evaluación de riesgos en el ingreso de funcionarios de países con antecedentes de terrorismo. El debate también se extendió a la comisión de Relaciones Exteriores y Culto, donde la ex titular de Migraciones, Florencia Carignano, reclamó respuestas sobre el procedimiento de otorgamiento de la visa y la falta de control por parte del cónsul argentino en Teherán.
«No cometí ningún error»: el descargo de Dabiri
Tras su destitución, Dabiri publicó un descargo en redes sociales afirmando que «no cometió ningún error» y que el viaje fue planificado previamente al Año Nuevo persa. Agradeció al presidente iraní por la confianza y defendió su gestión en el cargo. Su esposa, Sholeh Emami, cerró sus perfiles en redes sociales tras la viralización de las fotos. El escándalo dejó en evidencia la crisis económica en Irán, donde la devaluación del rial frente al dólar ha generado fuertes tensiones sociales. El caso también expuso las debilidades en los sistemas de seguridad y migración de Argentina, generando un debate sobre la necesidad de reforzar los controles para evitar el ingreso de personas con antecedentes o que representen un riesgo para la seguridad nacional.