La Corte Suprema de Justicia de la Nación dejó firme la condena a tres años de prisión en suspenso para el ex diputado peronista José Fernando Orellana, hoy legislador provincial en Tucumán, por el delito de abuso sexual simple contra una secretaria parlamentaria. El fallo unánime del máximo tribunal desestimó un recurso de queja de la defensa por no cumplir con los requisitos formales establecidos. Orellana, figura relevante en la política tucumana, es conocido, entre otras cosas, por alternarse la intendencia de Famaillá con su hermano mellizo.
Este caso se suma a una serie de denuncias y condenas por abuso o acoso sexual que involucran a políticos de peso en el país, como las dictadas contra el ex gobernador de Tucumán y senador José Alperovich, o el juicio oral en curso contra el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza.
## Los hechos y el proceso judicial
Según se desprende del expediente, el incidente tuvo lugar el 11 de noviembre de 2016 en un anexo de la Cámara de Diputados de la Nación. La víctima, secretaria de otra legisladora, acudió al despacho de Orellana para informarle sobre personas que lo esperaban. En ese momento, Orellana la abordó, diciéndole frases como “vos necesitaba alguien que te quiera” y “me encantas desde que te vi”. La tomó de la mano, le solicitó su número de teléfono y, levantándose de su silla, la sujetó y comenzó a besarla en la oreja, manifestándole: “seguramente nadie te besó así, ¿no?”.
Inicialmente, el Juzgado en lo Criminal y Correccional N°6 había decretado la falta de mérito y posteriormente el sobreseimiento de Orellana. Sin embargo, tras apelaciones de la Fiscalía y la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), el ex legislador fue procesado por abuso sexual simple y elevado a juicio oral.
El fiscal Sandro Abraldes sostuvo la acusación, valorando el testimonio de la víctima como «veraz, verosímil y persistente». Argumentó que Orellana «se valió de la posición de superioridad jerárquica, de la investidura de Diputado Nacional para intimidar a la víctima y de ese modo concretar el acto sexual”. La querella solicitó cuatro años de prisión. Orellana, en sus últimas palabras, negó la acusación, sosteniendo que se trataba de un intento de perjudicarlo políticamente.
## Sentencia y ratificación
En 2022, el juez Federico Salvá del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº 29, condenó a Orellana a tres años de prisión en suspenso. La sentencia incluyó una inhabilitación especial perpetua para el ejercicio de cargos públicos, una prohibición de acercamiento y contacto con la víctima, y la orden de obtener y remitir el perfil genético del condenado al Banco de Datos Genéticos, conforme a la ley vigente.
Tras conocer el fallo, Orellana, quien en ese momento era intendente de Famaillá, manifestó a la prensa: “Creo que no es justo, pero esto no me va a quebrantar. Si yo hubiera sido mala persona hubiera habido una lluvia de denuncias. Tomé el fallo con mucha tranquilidad». Pese a la condena, anunció su postulación para la legislatura provincial, cargo que actualmente ocupa, dejando la intendencia en manos de su hermano.
En 2024, la Cámara Nacional de Casación Penal confirmó la condena. El fallo destacó que las particularidades del caso, como el lugar de los hechos y el cargo del acusado, no impidieron comprobar la «efectiva materialidad de la imputación y la participación del acusado». Resaltó la importancia de la concordancia entre los relatos de la víctima y testimonios ajenos a las partes, recibidos poco después del incidente, como «relevante prueba de cargo».
La defensa de Orellana buscó la revisión de la sentencia ante la Corte Suprema, cuestionando la decisión y la valoración de la prueba. Sin embargo, como el recurso no cumplía con las pautas formales del reglamento de la Corte, el máximo tribunal desestimó la presentación, dejando firme la condena.