El pulso político de la Nación se eleva a niveles de ebullición insospechados. En medio de un clima enrarecido por la reciente prisión efectiva de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se prepara para su exposición ante el Senado de la Nación la próxima semana. Una cita que, como confirmaron fuentes de la Casa Rosada a Clarín, estuvo fijada con antelación y cuya fecha, programada para el jueves venidero a las 11 horas, fue ratificada por la vicepresidenta Victoria Villarruel.
Un tablero de ajedrez político
El funcionario ya recibió las preguntas por escrito hace un mes, y en el ámbito de la Jefatura de Gabinete se ultiman los detalles del informe final, que se enviará en la previa a su presentación, tal como lo estipula la práctica parlamentaria. Francos, quien en lo que va del año visitó la Cámara de Diputados en dos ocasiones (una en abril para su informe de gestión y otra para ser interpelado por el caso de la criptomoneda $LIBRA), no pisa el Senado desde noviembre de 2024. Su regreso se da en un momento particularmente sensible.
Con la situación judicial de la expresidenta «al rojo vivo», si bien Francos es reconocido como uno de los funcionarios más mesurados del actual Gobierno, su rol como jefe de ministros lo coloca en la primera línea de fuego. Es el rostro visible de una administración que, a través de figuras como Patricia Bullrich en Seguridad, ha despertado las críticas más férreas del kirchnerismo. «Él es más respetuoso pero es la cara del Gobierno. Algo le vamos a tener que decir», adelantaron desde Unión por la Patria, dejando entrever que la visita no será un mero trámite protocolar.
La presión de las provincias y la agenda legislativa
A la tensión política se suma el reclamo de los gobernadores. Preocupados por la caída de la recaudación y el estancamiento de las obras públicas, tal como informó Clarín, los mandatarios provinciales celebrarán una nueva cumbre en el CFI este lunes, reafirmando una agenda de demandas que, indefectiblemente, resonará en el recinto.
Paralelamente, la Cámara Alta busca asestar un golpe al Gobierno impulsando dos proyectos de ley de alto impacto social: mejoras previsionales y la emergencia en discapacidad. Ambas iniciativas ya obtuvieron la media sanción en Diputados. Esta meta, fijada como prioridad por el bloque de Unión por la Patria bajo la conducción de José Mayans en su encuentro con Cristina Kirchner previo a su detención domiciliaria, ha experimentado demoras. La razón: las comisiones encargadas de su tratamiento están presididas por legisladores libertarios o aliados que, por el momento, no las convocan. Para su debate en el recinto se requiere el respaldo de los dos tercios de los senadores, una cifra que, por ahora, no tiene garantías.
Entre las propuestas previsionales se destacan un aumento del 7,2% para todas las jubilaciones, la elevación del bono actual de $70.000 a $110.000 y la prórroga de la moratoria previsional, temas que añaden más leña al fuego del debate.
La Corte en el ojo de la tormenta
La visita de Francos al Senado también ha trastocado la agenda del plenario de comisiones que aborda la ampliación de la Corte Suprema, cuya reunión estaba prevista para el mismo jueves a la misma hora. Tras una cancelación la semana pasada por el fallo del Máximo Tribunal sobre la expresidenta, se optó por adelantar el encuentro para el miércoles a la mañana, con la participación de juristas y especialistas.
En esta comisión, el kirchnerismo, con especial énfasis, arremeterá contra los magistrados, a quienes CFK tildó de “triunvirato títere”. Además, se exige que el proyecto sea dictaminado esta misma semana. Una de las iniciativas que contarían con apoyo es la del salteño Juan Carlos Romero, que propone elevar a siete el número de miembros, con una exigencia adicional de igualdad de género para su elección.
En un intercambio retórico reciente, Francos manifestó el deseo del Gobierno de haber enfrentado a la expresidenta en las urnas, replicando a sus declaraciones sobre una supuesta «proscripción» por miedo a la derrota. «Si Cristina tiene razón, en las elecciones de octubre el pueblo nos castigaría. Pienso lo contrario, creo que los argentinos apoyan la reforma de Javier Milei y que lo van a votar”, sentenció el Jefe de Gabinete, marcando el terreno de la contienda ideológica.
Finalmente, el martes próximo será el turno del primer encuentro del Consejo de Mayo, liderado por Francos, que reunirá a legisladores, empresarios y gremialistas. El eje central será la reforma laboral, aunque también se contemplan reformas tributarias y previsionales. La representación de este consejo incluye a Federico Sturzenegger por el Ejecutivo, Alfredo Cornejo por las provincias, Gerardo Martínez (UOCRA) por los sindicatos, y Martín Rapallini (UIA) por el sector empresarial, junto a Cristian Ritondo y Carolina Losada, por la Cámara Baja y el Senado, respectivamente, configurando un espacio de diálogo que promete ser tan denso como el puré de zapallo, pero con menos condimento.
