el fallo que revolvió las ollas
La Paz, Jujuy. La Corte Suprema de Justicia de la Nación, en una decisión que resonó hasta en las cocinas más apartadas del país, resolvió revocar un fallo previo que había anulado la polémica elección de autoridades de la seccional porteña del gremio gastronómico. Estos comicios, celebrados en 2021, habían ratificado un nuevo mandato para el dirigente Dante Camaño al frente de la delegación sindical en la capital.
La determinación del máximo tribunal significó un categórico revés para Luis Barrionuevo, el mandamás nacional del sindicato, quien había puesto en tela de juicio la legitimidad de aquellas elecciones e incluso había intervenido la sección porteña de gastronómicos en el marco de su férrea disputa con su excuñado, Camaño.
Antes de esta flamante sentencia de la Corte, y gracias a resoluciones de otras instancias judiciales y una disposición reciente de las autoridades laborales del gobierno del presidente Javier Milei, Camaño ya había logrado recuperar la administración de los recursos financieros de la delegación porteña de los gastronómicos. Ahora, el dirigente eleva la apuesta, reclamando un faltante exorbitante de $ 40.000 millones en las cuentas bancarias del gremio. Este monto, según Camaño, sería producto de la recaudación de las cuotas de afiliados durante el período en que la intervención dispuesta por Barrionuevo controló la delegación.
«Los fondos no están y vamos a presentar una demanda penal por esos recursos», anticipó Camaño a este medio, con un tono que dejaba pocas dudas sobre su determinación.
El fallo de la Corte, rubricado por los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, dejó sin efecto la sentencia dictada por la Sala I de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo. Esta última había ratificado una resolución de primera instancia que declaraba la nulidad de los comicios de la seccional porteña de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA), aduciendo supuestas irregularidades.
argumentos que inclinaron la balanza
En su trascendental decisión, el máximo tribunal tomó en consideración los argumentos vertidos en el expediente por el procurador general, Eduardo Casal, quien había cuestionado duramente la sentencia de primera instancia. «El objeto de la litis consiste en dejar sin efecto las resoluciones (de la Junta Electoral) que ponen en tela de juicio el proceso comicial, y no comprende el examen de la legitimidad de la elección, cuyo resultado fue favorable a la Lista Gris que integra el actor», precisó Casal.
El procurador añadió, con una lógica que la Corte luego hizo propia: «la invalidez del acto electoral se dispuso sin que lo requiriera la accionada, quien se limitó a insistir en que habrían existido las anomalías que motivaron la suspensión». Este fundamento fue clave y retomado por la Corte en su sentencia, dándole un giro copernicano al pleito.
A partir de esta resolución de la más alta instancia judicial, la causa fue devuelta a los tribunales de origen para que se dicte un nuevo fallo, esta vez conforme a los contundentes lineamientos establecidos por la Corte, que con su decisión reconoció de manera explícita la validez de las elecciones en el sindicato.
«La decisión de la Corte marca un antes y un después porque pone fin a los avasallamientos de las seccionales de los sindicatos por parte de la conducción nacional. Se termina con los atropellos. Acá no hay más que discutir, se termina con una situación que nos causó mucho daño porque desfinanció a la seccional y los recursos que son de los afiliados que perdieron muchos servicios», insistió Camaño, haciendo hincapié en el impacto de la intervención sobre las prestaciones a los miembros del gremio.
una disputa con historia
La batalla por el control de la seccional porteña de gastronómicos se inició en 2021. En aquel entonces, se llevaron a cabo las elecciones para renovar a las autoridades de la delegación, considerada la más relevante del gremio a nivel nacional. Camaño presentó su candidatura buscando la reelección al frente de la conocida lista Gris, mientras que Barrionuevo, apelando a su influencia, impulsó la lista Azul, abriendo un nuevo capítulo en esta saga familiar y sindical.
Sin embargo, el proceso electoral culminó judicializado debido a que Barrionuevo impugnó el triunfo de la lista de su adversario. Así, un fallo de primera instancia le dio la razón al declarar la nulidad de los comicios por «graves irregularidades», una decisión que fue ratificada posteriormente por la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo. No obstante, ante la apelación interpuesta por Camaño, el fallo de la Corte Suprema rechazó esos argumentos y dejó sin efecto la nulidad de los comicios gremiales, volviendo a poner la pelota en juego.
Semanas atrás, la conducción porteña de los gastronómicos, ahora nuevamente en manos de Camaño –quien ya había recuperado la administración de las cuentas de la seccional–, intimó formalmente a Barrionuevo por el faltante de más de $ 40.000 millones de las cuentas bancarias de la delegación. Estos fondos, precisamente, se nutren de los aportes de los afiliados, lo que agrava la situación. Según anticiparon desde el sector, en los próximos días formalizarán una denuncia penal contra Barrionuevo por la desaparición de estos considerables recursos.
