Lacunza dijo que el Gobierno tardó demasiado en sacar el cepo.
Milei, con la sutileza de un hipopótamo en una cristalería, lo trató de mentiroso.
Caputo, elegante como siempre, le pidió que deje las mentiras para «los otros».
Al final, todos sabemos que en Argentina la economía es como un asado: todos opinan, nadie sabe bien cómo se hace y siempre termina quemado.
Lacunza enciende la mecha: Críticas al Gobierno por la demora en la salida del cepo
Un día después de que el Gobierno celebrara la eliminación del cepo cambiario, el exministro de Economía durante la gestión de Mauricio Macri, Hernán Lacunza, desató una polémica al criticar la demora en la toma de esta decisión. En una entrevista televisiva, Lacunza consideró que la medida llegó «tarde» y que el Gobierno podría haberla implementado el año pasado. «El Gobierno tardó demasiado y lo podría haber hecho el año pasado”, expresó en declaraciones a LN+.
Según Lacunza, la administración anterior disfrutaba de una «estabilidad ficticia» gracias al cepo, que mantenía el dólar fuera del foco mediático y la inflación en aparente calma. Sin embargo, esta estrategia se habría debilitado en las últimas semanas, llevando a una pérdida de reservas y un aumento del riesgo país. «Ese combo lo terminó de precipitar», sentenció.
Milei y Caputo contraatacan: Lacunza, en el ojo de la tormenta
Las declaraciones de Lacunza no cayeron bien en el oficialismo. El presidente Javier Milei, con su característico estilo directo, no dudó en calificar al exministro de «mentiroso» a través de la red social X. «Hernán Lacunza sos un mentiroso”, escribió el mandatario, arrobando al exfuncionario y acusándolo de difundir información falsa en el pasado.
Por su parte, el actual ministro de Economía, Luis Caputo, también respondió a las críticas de Lacunza en la misma plataforma. Caputo defendió la estrategia del Gobierno y aseguró que la salida del cepo estaba planificada desde el año pasado, pero sujeta a la concreción de acuerdos sobre los montos. «Lamento tener que desmentir así a alguien a quien tengo aprecio, pero es lo que corresponde», expresó, agregando con ironía : «Dejemos las mentiras para los kirchneristas».