Milei, cual economista rockstar, le bajó caña a los vivos que quieran remarcar precios post-cepo. “Se la van a tener que fumar”, sentenció, casi casi como un Nietzsche de la góndola.
Dijo que los costos no mandan en la fiesta de los precios, sino la gente con sus ganas de comprar. O sea, si nadie te compra el pan a precio oro, te lo vas a tener que morfar vos (o bueno, no literalmente…).
Adorni, el vocero, le hizo la segunda al jefe: “Si remarcan, se van a fundir como churros en aceite hirviendo”, pero con palabras más elegantes, obvio.
En resumen, si sos comerciante y se te ocurre subir los precios porque el dólar se fue al pasto, preparate para un viaje al país de las sobras.
Milei y la teoría económica para dummies
El presidente Javier Milei, en una extensa entrevista con Alejandro Fantino, abordó la posible suba de precios tras la eliminación del cepo al dólar con una singular combinación de teoría económica y lenguaje coloquial. Ante la pregunta de qué sucedería con quienes aumenten los precios, Milei respondió con una frase que rápidamente se viralizó: «Se van a meter los productos en el orto».
El principio de Menger: Precios vs. Costos
Milei explicó su postura recurriendo al principio de imputación de precios de Carl Menger, que establece que los precios son determinados por las valoraciones subjetivas de las personas y la escasez, no por los costos de producción. «Los precios son los que determinan los costos y no los costos los que determinan los precios», afirmó el Presidente, ilustrando su punto con el ejemplo de una botella de agua que vale diferente en un comercio y en el desierto del Sahara. «Si los precios pudieran ser determinados por los costos, no habría quiebras», sentenció.
Adorni: Sin emisión, no hay aumentos sostenibles
El vocero presidencial, Manuel Adorni, ratificó las declaraciones de Milei en Radio Mitre, advirtiendo a los comerciantes que «no van a vender nada» si aumentan los precios indiscriminadamente. Adorni explicó que, a diferencia del pasado, ahora no hay «convalidación monetaria» que permita sostener los aumentos. «Hoy tenés baja inflación y no emitís un solo peso. Cuando duplicás el precio de tu producto, el bolsillo del otro lado no tiene el doble de billetes, entonces no te van a comprar y vas a tener que volver al precio anterior», concluyó.