¿30.000 o 8000 y pico? El debate por los desaparecidos incendia la Plaza.
Milei, en el ojo de la tormenta. ¿Revisionismo histórico o negacionismo? Las Abuelas tienen la palabra… y Pérez Esquivel también.
La Cámpora dijo presente, copando la escena como es su costumbre. ¿Y el resto del peronismo? Bueno, también andaban por ahí, pero un poco más dispersos.
Hubo cánticos, banderas y hasta alguna que otra comparación inapropiada (cof cof, Videla, cof cof). Pero che, todo en paz. Ni un policía a la vista. ¿Será que Milei aflojó con el protocolo antipiquete o se olvidó de mandar a la yuta?
Marcha multitudinaria por el Día de la Memoria: Fuertes críticas a Milei y un llamado a la unidad
Una de las marchas más concurridas de los últimos años se llevó a cabo este lunes en conmemoración del Día de la Memoria, a 49 años del último golpe militar. Decenas de miles de personas, pertenecientes a diversas agrupaciones políticas, sindicales y de derechos humanos, se congregaron en Plaza de Mayo para recordar a las víctimas de la dictadura y expresar su rechazo a las políticas del gobierno de Javier Milei.
Rechazo al negacionismo y defensa de los 30.000 desaparecidos
Uno de los puntos centrales de la convocatoria fue el rechazo al cuestionamiento del número de desaparecidos durante la última dictadura militar, impulsado desde el gobierno. «Son 30 mil detenidos desaparecidos! ¡Fue y es genocidio! ¡No olvidamos, no perdonamos y no nos reconciliamos!», expresaron los organismos de derechos humanos en un documento conjunto leído en el acto central. Las críticas se dirigieron particularmente a Milei y a la vicepresidenta Victoria Villarruel, a quienes acusaron de «negacionismo y apologismo del genocidio». El Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, Estela de Carlotto y «Taty» Almeida fueron algunos de los oradores que encabezaron el acto.
Reclamos sociales y críticas a las políticas del gobierno
Además de la reivindicación de la memoria y la verdad, la marcha incluyó reclamos por diversas problemáticas sociales. Se exigió justicia por Pablo Grillo, el fotógrafo agredido por la policía en una manifestación anterior, y libertad para Milagro Sala. También se plantearon demandas por aumentos para jubilados, defensa de la educación y la salud pública, y rechazo al acuerdo con el FMI. Las consignas incluyeron pedidos de justicia por Santiago Maldonado, Mariano Ferreyra, Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, y respeto a las comunidades indígenas. La movilización se desarrolló de manera pacífica y sin incidentes, a diferencia de otras ocasiones en las que el Ministerio de Seguridad aplicó protocolos antipiquete. En esta oportunidad, la zona estuvo liberada de presencia policial, permitiendo la libre circulación de los manifestantes.