Pettovello, la superministra de Milei, ¿ángel o demonio? Despidos masivos, fallos judiciales en contra, denuncias por alimentos abandonados… ¿alguien pidió pizza con palomas?
Mientras tanto, los movimientos sociales planean su regreso triunfal a las calles. ¿Será el 2025 el año del piquete recargado? Prepárense, que se viene el congresito en la CGT.
Y la frutilla del postre: ¿la Corte Suprema le dará la derecha a Pettovello o se pondrá del lado del pueblo? El drama judicial continúa…
Pettovello en la mira: Despidos, denuncias y revés judicial
La gestión de Sandra Pettovello al frente del Ministerio de Capital Humano se encuentra en el ojo de la tormenta. Tras un breve reconocimiento por parte de Javier Milei en el Congreso, la superministra enfrenta una serie de controversias que la han vuelto al centro de la escena política.
La «motosierra» de Sturzenegger y la baja de planes sociales
El gobierno oficializará cerca de 2.000 despidos en la ex Secretaría de Economía Social, una decisión atribuida más a la influencia de Federico Sturzenegger que a la propia Pettovello. Paralelamente, un fallo judicial obliga al Gobierno a reincorporar beneficiarios de planes sociales dados de baja por participar en protestas, contradiciendo la postura de la ministra: «El que corta, no cobra». La medida judicial reaviva el debate sobre la legitimidad de las protestas sociales y la discrecionalidad del gobierno en la asignación de ayudas.
Denuncias por alimentos y el contraataque de las organizaciones sociales
Juan Grabois amplió la denuncia contra Pettovello por la supuesta acumulación de alimentos y útiles escolares en depósitos del ministerio. La polémica se suma a otro fallo judicial que obliga a Capital Humano a reincorporar comedores sociales a la lista de receptores de recursos estatales. En respuesta a las medidas del gobierno, las organizaciones sociales planean un congreso en la CGT para definir un plan de acción contra el acuerdo con el FMI y recuperar su protagonismo en las calles. El encuentro marcará un punto de inflexión en la relación entre el gobierno y los movimientos sociales, con posibles consecuencias en el clima social y político del país. La tensión aumenta mientras la Corte Suprema debe decidir sobre la apelación del gobierno en el caso de los comedores, un fallo que podría sentar precedente en la disputa entre el Ejecutivo y la Justicia.