¿PASO o no PASO? Esa es la cuestión que tiene al peronismo bonaerense en un estado de debate que haría sonrojar a Hamlet. Kicillof quiere desdoblar, Cristina dice «ni en pedo», y los intendentes miran con cara de «¿qué me importa?». La Cámpora, fiel a su estilo, desconfía de todos.
El tema es que para suspender las PASO necesitan los votos que ni La Cámpora ni los massistas quieren dar. ¿La solución? Reuniones secretas, llamados telefónicos a las 3 AM y, seguramente, algún asado donde se decida todo a último momento.
Mientras tanto, la fecha de las elecciones sigue siendo un misterio. ¿7 de septiembre? ¿3 de abril? Lo único seguro es que si este quilombo sigue así, van a terminar votando con figuritas.
El Peronismo bonaerense, en jaque por el debate sobre las PASO
La discusión sobre la suspensión de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en la provincia de Buenos Aires mantiene en vilo al peronismo, generando tensiones entre el gobernador Axel Kicillof, el kirchnerismo y los intendentes del conurbano bonaerense. Un intento fallido de derogar las PASO en la Legislatura provincial expuso la fractura interna, dejando en evidencia la negativa de La Cámpora y el Frente Renovador a acompañar la iniciativa.
Kicillof y Massa buscan una salida negociada
Tras el fracaso en la Legislatura, el gobernador Kicillof y el ministro de Economía Sergio Massa iniciaron conversaciones para destrabar la situación. Según trascendió, Massa estaría dispuesto a dar quórum y votar a favor de la suspensión de las PASO, a cambio de modificaciones en el proyecto presentado por el diputado Rubén Eslaiman. Se especula que la votación definitiva podría tener lugar este jueves o, en su defecto, el 3 de abril.
El Desdoblamiento, la manzana de la discordia
El punto central del conflicto reside en la posibilidad de desdoblar las elecciones provinciales de las nacionales. Kicillof impulsa esta medida, buscando anticipar los comicios bonaerenses. Sin embargo, Cristina Kirchner se opone firmemente, argumentando que un desdoblamiento perjudicaría al peronismo. Los intendentes, por su parte, se muestran a favor de la separación, considerando que les permitiría fortalecer sus estructuras locales y obtener mejores resultados. La desconfianza reina en el kirchnerismo, donde temen que los intendentes no dediquen el mismo esfuerzo a las elecciones nacionales si se desdoblan los comicios. Este escenario deja a Cristina Kirchner en una posición incómoda, buscando protegerse ante los procesos judiciales que enfrenta.