El gobernador Marcelo Orrego encabezó la ceremonia de inauguración de la flamante subcomisaría San Isidro, emplazada en la Villa San Isidro, en el departamento San Martín. Esta nueva infraestructura se presenta como un pilar fundamental para la consolidación de la seguridad y la optimización de la atención policial en la región, marcando un avance significativo en la estrategia provincial de prevención del delito y proximidad con los ciudadanos.
Acompañaron al primer mandatario provincial la intendenta de San Martín, Analía Becerra; el secretario de Seguridad, Enrique Delgado, junto a un nutrido grupo de funcionarios provinciales y departamentales.
Un compromiso renovado con la seguridad pública
Durante el acto inaugural, el gobernador Orrego enfatizó la relevancia de la obra: “Esta es una obra anhelada que hoy se hace realidad, fruto de una decisión política pensada para proteger y cuidar a la familia sanjuanina, desde la prevención y el combate del delito, pero también desde una mirada humana hacia quienes integran la Policía de San Juan. Tengo un profundo respeto y reconocimiento por cada hombre y mujer de la fuerza, y voy a estar siempre a su lado, redoblando esfuerzos con más recursos humanos, económicos e infraestructura, porque la seguridad es uno de los pilares centrales junto a la educación y la salud. Si trabajamos unidos, cuidándonos entre todos, no hay obstáculo que no podamos superar”. Con estas palabras, el Ejecutivo provincial reafirmó su estrategia de fortalecer el sistema de seguridad en San Martín, buscando una mayor presencia estatal en los barrios y potenciando la capacidad operativa de la fuerza policial.
Detalles arquitectónicos y funcionales de la nueva dependencia
La construcción del edificio se llevó a cabo utilizando un sistema tradicional de mampostería y hormigón armado, con la incorporación de ladrillo común y ladrillón. Losas y estructura de hormigón armado configuran su esqueleto. Los cielorrasos internos exhiben una terminación de yeso y cielorraso aplicado a la cal. En áreas como la cocina y los sanitarios, se optó por un revestimiento cerámico hasta la altura de losa, mientras que el sector de cocheras se resolvió con una sólida estructura de hormigón armado y una cubierta metálica. El exterior se distingue por un revestimiento plástico y amplios sectores de ladrillo visto con junta sellada, complementado por pisos exteriores ejecutados en hormigón alisado.
En su diseño interior, la subcomisaría cuenta con un área específica de requisa y dos calabozos equipados con piso epoxi, pensado para optimizar su desgaste y facilitar el mantenimiento. Los muros interiores de estas secciones se resolvieron con ladrillón cerámico armado, revoque fino y cielorraso a la cal. Los calabozos, además, disponen de núcleos sanitarios con artefactos de diseño antibandálico, priorizando la durabilidad y la seguridad.
La distribución funcional del edificio incluye un hall de acceso, una sala de espera con baños públicos adaptados para personas con discapacidad, un área de informes, logística, sumario, una oficina destinada al comisario con baño privado, depósito y archivo. También se contempló un acceso de servicio, el ya mencionado sector de requisa y los calabozos con su correspondiente sanitario. Adicionalmente, se integró un área de servicios con acceso vehicular y una cochera techada, completando una superficie total construida de 350,84 metros cuadrados.
