Ante el alerta meteorológica por fuertes vientos que afecta a toda la provincia de San Juan, Obras Sanitarias anunció el refuerzo de sus guardias de mantenimiento, servicios y centros de atención al usuario. El objetivo es garantizar la continuidad del servicio de agua potable en caso de que se registren inconvenientes derivados de las condiciones climáticas adversas.
¿Qué podría pasar con el agua?
Desde la empresa explicaron que las fuertes ráfagas de viento podrían ocasionar interrupciones en el suministro eléctrico, así como obstrucciones en las tomas de agua cruda. Ambos factores afectan directamente el funcionamiento habitual de los sistemas de distribución de agua potable.
Frente a esta posibilidad, las cuadrillas técnicas se encuentran en estado de alerta para actuar rápidamente si se presentaran fallas. Al mismo tiempo, se solicita la colaboración de la población para hacer un uso responsable del recurso.
Recomendaciones para los hogares
Obras Sanitarias recomendó a los usuarios extremar el cuidado de la reserva del tanque domiciliario, priorizando el consumo de agua potable para actividades esenciales como la bebida, la higiene y la alimentación.
El comunicado oficial aclara que estas medidas tienen carácter preventivo, y que se implementan para minimizar el impacto que puedan generar los vientos intensos sobre la infraestructura del servicio.
Por cualquier duda o emergencia relacionada con el servicio, se encuentra disponible la línea 0800-222-6773 o el teléfono 264 506 4444.
Obras Sanitarias activó un operativo especial ante el alerta meteorológica por fuertes vientos en San Juan. Se reforzaron guardias y centros de atención para garantizar el servicio de agua potable, ante posibles interrupciones por cortes eléctricos u obstrucciones en las tomas de agua cruda. Recomiendan cuidar el consumo del recurso en los hogares.
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A los sanjuaninos les avisaron que hay que cuidar el agua como si fuera el último Fernet en Año Nuevo. La advertencia no es menor: los vientos fuertes no sólo levantan tierra, techos y discusiones vecinales, también pueden dejar en pausa el suministro eléctrico y complicar el sistema de agua potable.
Obras Sanitarias, con reflejos más rápidos que un colectivero esquivando baches, reforzó sus guardias para que, si el agua no llega, por lo menos llegue alguien a atender el teléfono. Las ráfagas pueden obstruir tomas de agua cruda —no confundir con el vino casero sin filtrar—, y eso afecta el normal funcionamiento del sistema.
Por eso, sugieren extremar el cuidado de la reserva domiciliaria. En otras palabras: cerrá la canilla, dejá el lavarropas para otro día y usá el agua sólo para lo vital. Porque si bien el viento se lleva muchas cosas, que no se lleve también nuestra previsión hídrica. El viento es bravo, pero más bravo es un sanjuanino sin agua en plena siesta.
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