Apple profundiza en el control parental de sus dispositivos, permitiendo a los padres gestionar el uso que sus hijos hacen de los smartphones. La movida busca equilibrar la curiosidad de los pibes con la preocupación de los padres, ofreciendo desde límites de tiempo hasta filtros de contenido inapropiado, todo gestionado desde el iPhone de los adultos. La pregunta que queda picando: ¿es suficiente para proteger a los más jóvenes en el salvaje oeste digital?
## Apple le pone candado al iPhone de tus hijos: ¿solución o control excesivo?
El debate sobre cuándo darle un smartphone a un niño sigue más caliente que pava de termo a las cinco de la tarde. Y no es para menos, con el 69,6% de los pibes de entre 10 y 15 años usando estos aparatos, la preocupación de los padres está más que justificada. ¿Será que estamos criando una generación adicta a las pantallas o simplemente adaptándose a los tiempos que corren?
Apple, consciente de este quilombo, redobló la apuesta con sus sistemas de control parental. ¿La idea? Que los padres puedan vigilar y regular el uso que sus hijos le dan al iPhone. Pero, ¿hasta qué punto es sano este control? ¿No estaremos asfixiando la libertad de los más jóvenes en nombre de la seguridad?
«Una de las cosas más importantes para los padres o cuidadores es establecer canales de comunicación, asegurarse de que tus hijos pueden ir a hablar contigo si están preocupados por algo porque saben que estarás a su lado y les apoyarás», señaló Will Gardner, CEO de Childnet. La frase suena linda, pero en la práctica, ¿cuántos padres tienen realmente esa charla franca y abierta con sus hijos sobre los peligros de internet?
### Control parental by Apple: ¿cómo funciona la movida?
La estrategia de Apple se basa en crear una cuenta específica para el menor, controlada desde el iPhone de los padres. Desde ahí, se pueden establecer límites de tiempo, filtrar contenido inapropiado y hasta recibir notificaciones si el pibe intenta entrar a un sitio prohibido. Digamos que es como ponerle un patrullero a tu hijo, pero en versión digital.
Una de las funciones más llamativas es el filtro de contenido con inteligencia artificial. Si el iPhone detecta imágenes o videos con desnudos, los bloquea y le da al niño la opción de pedir ayuda a un adulto. Suena bien, pero la pregunta del millón es: ¿realmente esto impide que los pibes accedan a ese tipo de contenido o simplemente los obliga a buscarlo en otros lados?
### Más allá del filtro: ¿educación o censura?
Gardner insiste en que la clave está en promover el pensamiento crítico en los niños. Enseñarles a diferenciar lo real de lo falso, a detectar estafas y a cuestionar lo que ven en las redes sociales. El tema es que, en un mundo donde hasta los adultos caemos en las fake news, ¿cómo pretendemos que los pibes sean inmunes?
Pero no todo es negativo. Las herramientas de Apple también permiten controlar el tiempo que los chicos pasan frente a la pantalla y en qué lo utilizan. Se puede limitar el uso diario, bloquear el acceso a ciertas aplicaciones e incluso definir un «tiempo de inactividad» durante la noche. ¿Será esta la solución para evitar que los pibes se queden hasta las tres de la mañana scrolleando en TikTok?
En definitiva, la propuesta de Apple plantea un debate interesante. ¿Es legítimo que los padres tengan un control tan estricto sobre la vida digital de sus hijos? ¿O es mejor apostar por la educación y la confianza, dejándolos explorar el mundo virtual con sus propios límites? La respuesta, como siempre, no es sencilla y dependerá de cada familia. Pero una cosa está clara: la conversación sobre cómo criar a nuestros hijos en la era digital recién está empezando.