La Comisión Europea eligió a España como piloto para desarrollar una herramienta de verificación de edad, la «Cartera Digital Beta», que busca proteger a los menores de contenidos para adultos en internet. El proyecto, que ya está casi listo, genera debate sobre la privacidad y la efectividad de tales medidas, mientras la UE avanza en una ofensiva contra las plataformas pornográficas.
España, elegida por la ue para testear herramienta anti-porno: ¿solución o nuevo problema?
La Comisión Europea puso sus ojos en España para un proyecto que promete levantar polvareda: el desarrollo de una herramienta europea de verificación de edad. ¿El objetivo? Proteger a los menores de los contenidos para adultos que circulan por internet, léase, el porno. La noticia, confirmada por fuentes del Ministerio de Transformación Digital y de la Función Pública, pone sobre la mesa una iniciativa que el Gobierno español viene amasando desde hace un año y medio: la «Cartera Digital Beta».
Esta app, que según las autoridades está a un paso de caramelo, a la espera de la certificación de seguridad del Centro Criptológico Nacional, se enmarca en una prueba piloto de la UE para garantizar que la tecnología de verificación de edad sea segura y cumpla con los estándares exigidos por Bruselas. Junto a España, Francia, Grecia, Dinamarca e Italia también participan en esta movida.
Los proyectos que superen el filtro tendrán la chance de ofrecer sus detalles técnicos a otros Estados miembros que quieran construir su propia herramienta. Desde el departamento que dirige Óscar López celebran la selección como un espaldarazo a este proyecto clave. Pero, ¿es oro todo lo que reluce?
## El porno y los menores: una preocupación que une a sánchez y a la ue
El presidente Pedro Sánchez ya había manifestado su inquietud por la protección de los menores en el entorno digital. En enero de 2024, anunció un proyecto de ley y una estrategia integral interministerial para abordar el tema, alertando sobre una «auténtica epidemia de menores que tienen acceso a contenidos pornográficos». Las cifras que maneja el Gobierno son alarmantes: «Uno de cada cuatro jóvenes de menos de 12 años ha tenido o tiene acceso y consume porno. Casi la mitad de los jóvenes de menos de 15 años lo consumen», afirmó Sánchez. «Y esto no es puritanismo. Esto afecta a la formación de nuestros adolescentes y también a los comportamientos futuros que puedan tener en un tema tan trascendental como es la igualdad».
Esta preocupación parece ser compartida por la UE. La Comisión Europea anunció una ofensiva contra las páginas pornográficas, lanzando una investigación sobre grandes plataformas como Pornhub y planteando medidas contra sitios más pequeños.
## Cartera digital beta: ¿la solución o un nuevo laberinto?
La «Cartera Digital Beta» promete ser la llave para acceder a contenidos para adultos en internet. Esta app almacena una credencial de mayoría de edad emitida por el Gobierno, que las plataformas podrán consultar para permitir el acceso. El truco, según las autoridades, es que no se intercambia información personal, más allá de la verificación de la edad. Pero, ¿es realmente tan sencillo?
España, junto con Francia y Grecia, impulsa una propuesta para fijar una edad mínima de acceso a las redes sociales y obligar a los fabricantes de dispositivos a integrar herramientas de verificación de edad y control parental. La normativa europea eIDAS2 establece que, a partir de noviembre de 2026, los Estados miembros deben ofrecer a los ciudadanos medios para identificarse digitalmente de forma segura. La cartera digital europea permitirá, en teoría, evitar tener que llevar documentos físicos o ceder datos en trámites oficiales.
La app española busca certificar la mayoría de edad de forma anónima, pero también incorporará otros servicios, como la acreditación de títulos universitarios. El Gobierno anunció este plan en enero del año pasado, con la promesa de tener la herramienta lista para finales de 2024. El entonces ministro José Luis Escrivá aseguró que la app cumpliría con los estándares de la cartera digital europea, «especialmente los que tienen que ver con la protección de la identidad, para que la verificación de la edad sea segura y anónima».
Sin embargo, los expertos ya plantean interrogantes sobre la viabilidad y seguridad de este tipo de sistemas. El gran temor es que los mecanismos de verificación de edad terminen con el anonimato digital de los usuarios. ¿Estamos ante una solución efectiva o ante un nuevo problema de privacidad y seguridad? El debate está abierto.