Samsung redobla la apuesta por la IA en su nuevo Galaxy S25, integrando funciones que permiten automatizar tareas complejas a través de comandos de voz. ¿Será esta la revolución en la interacción usuario-dispositivo que tanto esperamos o solo un gimmick más para justificar el precio?
El nuevo Samsung Galaxy S25 llegó al mercado con una promesa que resuena fuerte en el ambiente tecnológico: la inteligencia artificial como eje central de la experiencia del usuario. Después de una primera incursión con el modelo anterior, la firma coreana profundiza su apuesta, buscando transformar la forma en que interactuamos con nuestros dispositivos. ¿Pero realmente estamos ante un cambio de paradigma o es solo marketing disfrazado de innovación?
### ¿Un asistente virtual omnipresente?
La principal novedad del Galaxy S25 radica en su capacidad para ejecutar acciones complejas que involucran múltiples aplicaciones con una simple instrucción de voz. Olvidate de navegar entre menús y apps: ahora, supuestamente, podés pedirle al teléfono que busque cafeterías cercanas y las comparta con tus contactos por WhatsApp, todo sin mover un dedo. Suena tentador, pero ¿será tan fluido en la práctica?
Según un estudio encargado por Samsung, más del 60% de los usuarios de la generación anterior ya utilizan las funciones de IA. Entre las más populares, destaca «Circle to Search» y la traducción simultánea de llamadas. El nuevo modelo, con su sistema operativo One UI 7 basado en Android 15, busca llevar esta integración un paso más allá, incorporando «agentes de IA» capaces de automatizar tareas sin intervención humana.
El diseño del Galaxy S25 también presenta novedades, con esquinas redondeadas y sensores de cámara más prominentes. En cuanto a las especificaciones técnicas, el dispositivo cuenta con una pantalla Quad HD+ de 6,9 pulgadas, procesador Qualcomm Snapdragon 8 Elite y 12 GB de RAM. Todo esto, por un precio que arranca en los 1.459 euros. ¿Justifica el precio esta nueva camada de IA integrada?
### Inteligencia artificial: ¿aliada o invasora?
Samsung pretende que su Galaxy S25 sea el embrión de una nueva forma de interactuar con los dispositivos. Una comunicación más natural, fluida, donde la IA se anticipa a nuestras necesidades y nos libera de tareas repetitivas. Pero, ¿a qué costo? ¿Estamos dispuestos a ceder aún más control a la tecnología a cambio de comodidad?
La IA del Galaxy S25, que combina Google Gemini y el asistente Bixby de Samsung, puede acceder a aplicaciones de la compañía, de Google e incluso de terceros como WhatsApp o Spotify. Esto le permite, por ejemplo, agregar partidos de fútbol al calendario o buscar recetas con los ingredientes que tenés en la heladera. Sin embargo, algunas tareas requieren de múltiples interacciones y la IA no siempre interpreta correctamente nuestras intenciones.
«Parece que el Galaxy S25 tiene cierta capacidad de interpretación del lenguaje natural, que le permite separar el grano de la paja», comentan desde Samsung, aunque admiten que la IA tiende a repetir el mismo esquema para las siguientes instrucciones, incluso si no son del todo iguales.
### Más allá de los trucos: ¿qué podemos esperar del Galaxy S25?
El Galaxy S25 también incluye funciones como «Now Brief», un resumen diario que extrae información del calendario, el clima y las noticias más relevantes. Además, ofrece herramientas de edición generativa que permiten borrar elementos no deseados de las fotos o mejorar la calidad de las imágenes nocturnas.
La cámara del dispositivo, con una lente principal de 200 megapíxeles y múltiples lentes ultra gran angular y teleobjetivos, promete un rendimiento excepcional en diversas condiciones de luz. En cuanto al video, la IA es capaz de separar los sonidos de interés de los ruidos de fondo.
«El Galaxy S25 permite una traducción simultánea, no solo en las llamadas telefónicas sino en las de WhatsApp y Google Meet», señalan desde Samsung. Sin embargo, la utilidad de esta función dependerá en gran medida de la integración de las aplicaciones de terceros.
La pregunta que queda flotando en el aire es si el Galaxy S25 logrará trascender la categoría de simple gadget con funciones llamativas para convertirse en una herramienta indispensable en nuestro día a día. Solo el tiempo y la opinión de los usuarios darán la respuesta final. Por lo pronto, la polémica está servida.
