Elden Ring: Nightreign, una reimaginación souls-like que redefine el desafío
Elden Ring: Nightreign no es una simple expansión del aclamado título de FromSoftware de 2022, sino una reimaginación cooperativa, roguelike y acelerada de la fórmula souls-like. Y aunque no es perfecta, lo que propone es adictivo, brutal y muy rejugable.
La oscuridad de Limveld y el ciclo de los tres días
Ambientado en Limveld, un mundo generado proceduralmente que recuerda a Necrolimbo pero pervertido por la corrupción, Nightreign nos pone en la piel de los Nightfarers, héroes de múltiples eras que luchan para romper el ciclo de terror impuesto por el Nightlord.
El gameplay gira en torno a Expediciones que duran tres días y dos noches, con combates cada vez más complejos y culminando en un enfrentamiento final contra un Nightlord Avatar.
Al derrotar a los jefes activarás cataclismos, los cuales afectan de manera drástica el mapa, además de añadir nuevas zonas que generalmente tienen recompensas bastante jugosas. ¿Ves una nube negra en forma de tornado? Prueba entrar en ella para encontrarte a tu contraparte corrupta por la noche, el premio va desde armas o ítems poderosos hasta una cantidad abundante de runas que te serán sumamente útiles para derrotar a próximos jefes y no fracasar miserablemente en tus expediciones.

Un souls-like renovado, más ágil y cooperativo
El combate se mantiene exigente, pero es más dinámico y vertiginoso. A diferencia de títulos previos, aquí se prioriza el trabajo en equipo (recomendado en escuadras de tres jugadores), la sinergia entre habilidades y la exploración estratégica.
El sistema de loot y progresión es intuitivo, pero tiene cierto grado de complejidad, ya que el equipo (armas, talismanes, consumibles) tiene afinidades elementales, efectos pasivos únicos y niveles de rareza. Todo puede influir en tu rendimiento, desde la resistencia a Scarlet Rot hasta la capacidad de revivir aliados más rápido.
En cuanto a la riqueza en la exploración, el mapa es lo suficientemente grande, y debido a que es cambiante en cuanto a zonas y configuraciones, es prácticamente imposible abarcarlo completo en un solo run.
Y aunque después de un rato puedes ubicar perfectamente campamentos, iglesias y hasta algunos cataclismos, el mundo puede arrojarte eventos aleatorios en momentos diferentes, lo que evita que las expediciones sean repetitivas.
Por ejemplo, las zonas como Rotted Woods o The Crater están llenas de enemigos únicos, eventos especiales (Shifting Earth, World Raids) y decisiones tácticas.
Estos eventos, aunque pueden ser bastante lucrativos, también representan un reto constante, pues puedes (literalmente) morir en el intento. Si sobrevives, la recompensa será bastante grande, así que prepárate para lidiar con la frustración del combate en el que muchas veces te quedarás a un golpe de la victoria.
También otorga bastante libertad, pues es decisión de cada jugador si quieres lanzarte de lleno a las peleas con cada jefe o dedicarte a conseguir experiencia y hacer todas las cosas que te ofrece para asegurarte de no perder lo que has conseguido u obtener mejoras de personaje más rápido. Nightreign está lleno de decisiones que irás mejorando o ajustando en cada partida.

Roles claramente definidos y una experiencia cooperativa mejorada
Hablando de personajes, éstos tiene roles claramente definidos. En Elden Ring: Nightreign existen ocho clases (o Nightfarers) con estilos bien diferenciados: desde el tanque Guardian que protege con su Wings of Salvation, hasta el letal Wylder con su Onslaught Stake capaz de romper la postura de un jefe de un solo golpe.
Nightreign acelera el ritmo del combate clásico soulsborne, manteniendo la profundidad táctica pero añadiendo elementos roguelike y énfasis en sinergias cooperativas.
También destaca una mejora considerable en el netcode respecto a Elden Ring, con sesiones online estables y sin desconexiones frecuentes, lo que hace la experiencia cooperativa mucho más fluida y disfrutable.
La unión hace la fuerza, pero el solitario sufre
Y aunque como dijimos anteriormente se recomienda jugar en equipos de tres, el modo solitario está disponible… pero es brutalmente más difícil. De hecho, apostamos que veremos a muchos creadores de contenido superando desafíos extremos en este modo.
Así que si decides emprender esta aventura en solitario, prepárate para el sufrimiento, pues en la mayoría de las batallas tus condiciones serán infinitamente inferiores al enemigo en cuestión. Aquí no sirve de nada lanzarte a la pelea de manera salvaje y al grito de guerra, pues además de que estarás condenado a muerte casi instantáneamente, esta derrota te restará nivel y tendrás que regresar justo al lugar donde moriste en un bucle infinito.
Y aunque los jefes están programados para ser menos agresivos cuando se enfrentan a un solo jugador, aún así implican un reto bastante exigente que, aunque es posible, termina por volverse sumamente frustrante.
Personalización, fanservice y un sistema de progresión sólido
Todos los skins cosméticos son desbloqueables in-game, sin necesidad de microtransacciones.
Hay un claro toque de fanservice visual en varios trajes, algo que sin duda agradará a los fans más veteranos.
El progreso está diseñado alrededor de Expediciones que te otorgan mejoras permanentes, nuevas armas y Relics que alteran profundamente el estilo de cada personaje (Nightfarer).
Jefes espectaculares y un reto que exige coordinación
Nightreign marca el regreso de varios bosses presentes en Elden Ring, incluyendo a algunos de los jefes finales mas icónicos de esta saga.
Como es costumbre en la franquicia, las peleas con cada boss son tan difíciles como espectaculares, por lo que el trabajo en equipo, con estrategia y bien coordinado será fundamental para sobrevivir cada run.
Siempre pueden decidir ser más conservadores, pero recuerda que a mayor riesgo, mejor será la recompensa obtenida en batalla.
No queremos ahondar en el reto que te implicará cada uno de los 8 Nightlords de Nightreign, ya que definitivamente es una batalla que debes librar por ti mismo, pero sí te diremos que cada uno de estos jefes está a la altura de las expectativas y no decepcionan para nada.
Protip: encuentra la debilidad elemental de cada jefe y aprovéchala. No basta con hacer más daño con un elemento específico, sino que elegir la mejor arma en cada caso te permitirá romper su guardia más fácil o cortarle alguno de sus letales ataques.
Elden Ring: Nightreign no reinventa la rueda, pero sí le cambia las llantas, la suspensión y el motor. Es un souls-like enfocado en la cooperación, la exploración tensa y los builds experimentales. Si bien aún hay aspectos qué pulir, lo que ofrece es un reto adictivo con un sistema de progresión sólido y muchas horas de contenido. El alma de FromSoftware está aquí… pero ahora, con amigos (y mejores servidores).