<div class="semiton-wrapper" data-texto="¡Ojo! Científicos detectaron que la IA está más copiona que alumno en final de julio. 19.000 papers y 23.000 patentes revelan que la visión artificial, en vez de ver gatitos tiernos, prefiere espiar gente. ¡Qué feo!
El estudio en Nature dice que entre 1990 y 2010 se quintuplicaron los estudios sobre reconocimiento facial. ¡Quintuplicaron! ¿Será que alguien está pensando en Gran Hermano a escala global?
Lo peor es que camuflan la cosa. En vez de decir "persona", dicen "objeto" o "anatomía". ¡Más caretas que acto escolar! El 90% de los estudios y el 86% de las patentes se enfocan en nosotros, los humanos. ¡Ni una para los perros salchicha!
La IA nos mira caminar, comprar, juntarnos… ¡Más control que la AFIP! Los capos de esto son EE.UU., China y algunos más. ¿Será que nos están preparando para el mundo de Minority Report? ¡A afilar el sexto sentido!">
El Ojo que Todo lo Ve: La Inteligencia Artificial y su Fascinación por la Vigilancia
Un equipo de científicos ha emitido una advertencia que resuena como un trueno en el mundo de la tecnología: la investigación en inteligencia artificial (IA) está tomando un cariz preocupante, con un enfoque creciente en sistemas de vigilancia masiva. La conclusión surge de un exhaustivo metaanálisis publicado en la prestigiosa revista Nature, que examinó 19.000 artículos científicos y 23.000 patentes relacionadas con la IA y el reconocimiento visual. Los resultados, según los autores, "contrastan con la idea de que la mayoría de los tipos de visión artificial y extracción de datos son inofensivos".
El Auge del Reconocimiento Humano
El estudio revela que, entre las décadas de 1990 y 2010, los trabajos sobre reconocimiento avanzado de personas se multiplicaron por cinco, con un énfasis particular en términos como “iris”, "reconocimiento facial" y “etnia”. Esta tendencia, según los investigadores, sugiere una normalización del reconocimiento humano y la segmentación de rasgos específicos. Es como si, de repente, todos tuviéramos un cartel luminoso sobre la cabeza indicando nuestra etnia y color de ojos.
Los investigadores notaron una sutil, pero inquietante, estrategia de camuflaje en la terminología utilizada. Se observó que muchos textos sustituyen deliberadamente el concepto “persona" por palabras como “objeto” o “anatomía”. Una jugada digna de un mago, solo que en lugar de conejos, sacan información personal.
¿Un Futuro Orweliano?
El trabajo destaca que los métodos de extracción de datos se concentran en actividades cotidianas como caminar, comprar y reunirse en grupos, mientras que las tecnologías desarrolladas están orientadas a la detección, seguimiento, conteo de cuerpos y predicción de actitudes. Los espacios más analizados incluyen hogares, oficinas y calles. Es como si estuviéramos protagonizando nuestra propia versión de The Truman Show, solo que en lugar de Jim Carrey, el protagonista es usted, estimado lector.
El estudio identifica a Estados Unidos, China, Reino Unido, Alemania y otros 24 países como líderes en esta carrera por la vigilancia tecnológica. Los campos de estas patentes incluyen detección facial, seguimiento de movimiento, redes neuronales, segmentación de imagen, reconstrucción 3D y extracción de características. En resumen, todo lo necesario para construir un Gran Hermano digital a escala global.
“La consecuencia de volver gradualmente estos espacios públicos y sociales y hacerlos susceptibles de observación es un mecanismo fundamental de vigilancia", sentencia el estudio. Una frase que debería hacernos reflexionar sobre el futuro que estamos construyendo, o permitiendo que se construya, mientras miramos hacia otro lado.