Un informe revela que los mensajes de odio en redes sociales se dispararon en España, alcanzando un pico alarmante durante los disturbios de Torre Pacheco. A pesar de la evidencia, las plataformas como X, Facebook, Instagram, TikTok y Youtube actuaron con lentitud, retirando solo una pequeña fracción de los contenidos denunciados. El gobierno español ha creado un grupo de seguimiento para abordar esta problemática, mientras que las empresas de redes sociales se defienden argumentando que equilibran la libertad de expresión con la necesidad de eliminar el discurso de odio.
## El odio se viraliza: redes sociales bajo la lupa tras los disturbios en Torre Pacheco
¿Qué pasa cuando el mundo digital se cruza con la realidad? En España, parece que la respuesta es un aumento preocupante de mensajes de odio, tal como lo demuestran los sucesos que culminaron en los disturbios de Torre Pacheco. Un informe reciente revela un incremento del 1500% en los mensajes de odio en redes sociales durante un día clave de julio de 2025, lo que pone en el centro del debate el rol de las plataformas en la propagación de este tipo de contenido.
### Un pico de odio en la red, una respuesta moderada en la realidad
El informe detalla que, mientras un día normal se registran alrededor de 2.000 mensajes de odio, el 12 de julio esta cifra escaló a 33.000. Este pico coincidió con la agitación social en Torre Pacheco, donde rumores y mensajes xenófobos alimentaron la tensión en las calles. Los blancos principales: personas del norte de África, con palabras como «paliza», «mierda» y «machete» inundando las redes.
Lo que resulta llamativo, y para algunos indignante, es la respuesta de las plataformas. A pesar del aumento exponencial de mensajes de odio, la actividad de eliminación de contenido se mantuvo en niveles rutinarios, incluso por debajo de días anteriores. ¿Priorizan el «engagement» por sobre la seguridad y el bienestar de la comunidad? La pregunta queda flotando en el aire.
Desde el gobierno español, las críticas no se hicieron esperar. De los 2.870 contenidos de odio notificados a las redes durante 2024, solo se retiró un 35%, y apenas el 4% fue eliminado en las primeras 24 horas tras la denuncia. Cifras que hablan por sí solas y que plantean interrogantes sobre la eficacia de los mecanismos de control de las plataformas.
### X en la mira, Telegram en las sombras
El informe señala que X (antes Twitter) fue la plataforma con mayor número de notificaciones de contenido de odio, pero también la que menos material eliminó. TikTok, en cambio, se posicionó como la más diligente en acatar las solicitudes de remoción.
Pero la historia no termina ahí. Telegram, la plataforma de mensajería conocida por su laxa política de moderación, también jugó un papel clave en la difusión de mensajes de odio, aunque su naturaleza privada dificulta el monitoreo. Los grupos cerrados, donde se «cocinan» las estrategias de desinformación y odio, representan un desafío adicional para las autoridades.
### ¿Colaboración o lavado de cara?
Ante la creciente presión, el gobierno español ha creado un grupo de seguimiento con las grandes plataformas para analizar los discursos de odio en redes sociales. La ministra de Inclusión, Elma Sáiz, calificó esta colaboración como «sin precedentes», pero queda por verse si este nuevo espacio de diálogo se traducirá en acciones concretas y resultados tangibles.
Mientras tanto, las empresas de redes sociales se defienden. Meta, propietaria de Facebook, asegura tener «políticas estrictas» contra las conductas de odio, la incitación a la violencia y el acoso. Google, por su parte, afirma que la mayoría del contenido denunciado en YouTube no infringe sus directrices sobre discurso de odio.
¿Realidad o relato? La discusión está abierta. Lo cierto es que el problema del odio en redes sociales persiste, y la sociedad exige respuestas claras y contundentes. La libertad de expresión es un derecho fundamental, pero no puede ser un escudo para la impunidad. El debate está más vivo que nunca, y el futuro de la convivencia digital está en juego.