Se armó el tole tole en Alpine: Colapinto, el pibe argentino, parece que le sacó lustre al australiano Doohan en los tests de Barcelona. Briatore, con el ojo puesto en ambos, analiza si hay que hacer cambios antes de que arranque la temporada 2025 de la F1. ¿Debut soñado o banquillo?
La pretemporada de la Fórmula 1 todavía no arrancó oficialmente, pero en el box de Alpine ya se respira un aire espeso. La llegada de Franco Colapinto como piloto de reserva no fue precisamente un trámite, y ahora, para echarle más leña al fuego, se filtró que el argentino habría clavado mejores tiempos que el mismísimo Jack Doohan, el piloto titular, en los ensayos privados que se mandaron con el modelo 2023 en el circuito de Barcelona.
¿El que está moviendo los hilos? Ni más ni menos que Flavio Briatore, el mandamás del equipo. El italiano, famoso por su olfato para detectar talentos (y también por algunas estrategias poco ortodoxas, digamos), pidió informes detallados comparando el rendimiento de ambos volantes. Ya en las pruebas de Abu Dhabi, al cierre de la temporada pasada, Colapinto había dejado su sello, marcando tiempos 0.3 segundos más rápidos por vuelta que Doohan, ¡y eso que estaba al mando de un Williams!, un auto que, en teoría, debería ser menos competitivo que el Alpine. Una diferencia como la que le sacaba el «Flaco» Traverso a sus rivales en el TC2000, pero con esteroides.

¿Colapinto al volante o Doohan a boxes?
Pero la cosa no quedó ahí, porque en los recientes tests privados de Barcelona, los cronómetros (siempre traicioneros, como diría Fangio) volvieron a sonreírle al argentino. Según publicó F1actu.com, Colapinto habría sido entre dos y cinco décimas de segundo más rápido por vuelta. ¡Una eternidad en el mundo de la Fórmula 1!
En el ambiente, los rumores ya empezaron a correr como reguero de pólvora. ¿Estamos ante un posible cambio de piloto en plena temporada? Si Doohan no logra demostrar que tiene pasta de campeón en las primeras cinco carreras (Australia, China, Japón, Baréin y Arabia Saudita), las que tiene aseguradas por contrato, el banco de suplentes podría convertirse en su peor pesadilla. Y ahí, Colapinto estaría listo para saltar a la cancha con la 10 en la espalda, como Riquelme en Boca.
Colapinto en Alpine, con buzo prestado y casco «nuevo»
Doohan, por su parte, sabe que la tiene brava. Consciente de la presión, el australiano declaró estar enfocado en demostrar su valía en la pista y callar las bocas de los que lo critican. «Esperé este momento toda mi vida. Quiero demostrar que merezco mi lugar», aseguró a Sky Sports F1, con la garra de un Horacio Pagani defendiendo sus ideas.
Mientras tanto, Colapinto se mantiene en modo «laburante», preparándose a conciencia entre el asfalto y el simulador. «Estoy acá para ayudar al equipo a progresar, pero estaré preparado si me necesitan», declaró el argentino, con la humildad de un Carlos Bianchi dirigiendo.
Próxima estación: Baréin
El próximo round de esta batalla interna tendrá lugar en Baréin, a fines de febrero, durante las pruebas oficiales de pretemporada. Allí, Colapinto tendrá la oportunidad de medirse cara a cara con Doohan al mando del modelo 2025 de Alpine. Una oportunidad para demostrar de qué está hecho y para que los que dudan se tengan que tragar sus palabras. ¿Se viene el «Colapintazo»? El tiempo dirá.