El volante ofensivo de San Lorenzo, Matías Reali, se mandó un partidazo contra Liverpool de Uruguay, dejando a los hinchas con la boca abierta. Con pases de otro planeta y remates que besaron el palo, Reali demostró que tiene la magia en los pies para llevar al Ciclón a lo más alto de la Copa Libertadores. ¿Será este el despegue definitivo del pibe?
# Reali, el pibe que ilusiona a San Lorenzo: ¿Nace una estrella en Boedo?
San Lorenzo venció 3-2 a Liverpool de Uruguay en un partido cargado de emociones y, sobre todo, de fútbol. Pero si hay un nombre que resonó con fuerza en el Nuevo Gasómetro, ese fue el de Matías Reali. El volante ofensivo, con una actuación que recordó a los mejores enganches del fútbol argentino, se llevó todos los flashes y despertó la ilusión de los hinchas del Ciclón.
«Uno de sus mejores partidos en San Lorenzo: lo arrancó con un pase sin tocar el balón para habilitar a Irala y siguió su show con dos tiros en el poste, uno sin ángulo y el otro de media distancia. Toque delicioso para dejar mano a mano a Romaña, quien erró frente al arco. Le cometieron el foul del penal del 2-1», así lo describió en su crónica del partido.
## ¿Un nuevo ídolo en el Ciclón?
Desde el inicio del encuentro, Reali demostró que estaba enchufado. Un pase de esos que solo los elegidos pueden ver habilitó a Irala, dando una muestra de su visión de juego y calidad técnica. Pero no se quedó ahí. Dos remates al poste, uno de ellos sin ángulo, demostraron su capacidad para generar peligro desde cualquier sector del campo.
«Toque delicioso para dejar mano a mano a Romaña», señalan, aunque el delantero no pudo concretar. Y como si fuera poco, le cometieron el penal que le dio la victoria al equipo de Insua. ¿Qué más se le puede pedir a un jugador?
## Reali y el desafío de la regularidad
Es cierto, un partido no hace a un jugador. Pero la actuación de Reali ante Liverpool dejó en claro que tiene el talento para marcar la diferencia. Ahora, el desafío para el volante ofensivo es mantener este nivel y demostrar que puede ser una pieza clave en el esquema de San Lorenzo.
¿Estamos ante el nacimiento de una nueva estrella en Boedo? Solo el tiempo lo dirá. Pero si Reali sigue mostrando este nivel, los hinchas del Ciclón tienen motivos para ilusionarse. Lo que sí es seguro es que, al menos por un rato, nos hizo recordar esos enganches que ya no abundan en el fútbol moderno, esos que te sacaban una sonrisa con una gambeta o un pase impensado. Y eso, en tiempos donde el resultadismo parece ser la única verdad, es para celebrar.
