San Lorenzo, puntero con Miguel Russo, visita a Huracán en Parque Patricios con una racha negativa en clásicos que preocupa: no gana desde abril de 2023. ¿Podrá el Ciclón romper el maleficio o seguirá el karma?
¿Se terminó la malaria?: San Lorenzo y una racha de clásicos que mete miedo
Con Miguel Russo al mando, San Lorenzo parece haber encontrado el rumbo. De pelear el descenso, el Ciclón pasó a liderar su zona con un fútbol práctico y efectivo, digno del mejor Mostaza Merlo. Pero hay un karma que persigue al equipo de Boedo: los clásicos. La última victoria data de abril de 2023 contra Boca, un 1 a 0 ajustado que parece una eternidad. Desde entonces, acumulan la friolera de 14 partidos sin conocer la victoria. Cuatro derrotas y diez empates, una estadística que preocupa hasta al más optimista.
Con Miguelito en el banco, la historia no cambió demasiado. Una derrota contra Racing, que nos hizo acordar al famoso 4 a 1 en el Cilindro, y dos empates con River, incluyendo el del último torneo, mantienen la sequía clásica. ¿Será Huracán la víctima para cortar la mufa?
El Globo, un rival en reconstrucción
Este domingo, en el Palacio Ducó –que dicho sea de paso, más parece un quincho con goteras que un palacio–, San Lorenzo visita a un Huracán que busca su identidad. El Globo, que el año pasado peleó el campeonato hasta el final como el mejor equipo del mundo después del Real Madrid de Di Stéfano, hoy está octavo en su zona y se agarra de las uñas para clasificar a octavos de final. Kudelka, con menos magia que el Mago Capria un lunes a la mañana, intenta rearmar un equipo que supo ser protagonista.
El historial negro: la sequía clásica del Ciclón en números
Para entender la magnitud del problema, repasemos los números fríos. Desde aquel lejano abril de 2023, San Lorenzo jugó 14 clásicos con el siguiente saldo:
- Contra Boca: 3 partidos (0 ganados, 1 empatado, 2 perdidos). ¿Será que extrañan los goles de Palermo?
- Frente a River: 3 partidos (0 ganados, 3 empatados, 0 perdidos). Empates con sabor a poco, como un asado sin chimichurri.
- Con Independiente: 1 partido (0 ganados, 1 empatado, 0 perdidos). Un clásico descafeinado, como tomar mate cocido.
- Ante Racing: 4 partidos (0 ganados, 2 empatados, 2 perdidos). Dos derrotas que todavía arden, como el gol de Milito en el 2014.
- Contra Huracán: 3 partidos (0 ganados, 3 empatados, 0 perdidos). ¿Se repetirá la historia o habrá un batacazo como el del 99 con el gol del Pipi Romagnoli?
El domingo, en Parque Patricios, se define mucho más que tres puntos. San Lorenzo necesita romper la mufa y volver a festejar en un clásico. La pregunta es: ¿podrá el equipo de Russo vencer al karma y a Huracán, o la racha negativa seguirá estirándose como un chicle viejo? El debate está abierto.
