Nicolás Ramírez, árbitro argentino, dirigió un partido del Al Nassr de Cristiano Ronaldo en Arabia Saudita y cuatro días después pitará la Supercopa Internacional entre River y Talleres. La presencia de árbitros argentinos en la liga saudí se ha vuelto habitual debido a la búsqueda de jueces extranjeros por el bajo nivel local.
Nicolás Ramírez, un árbitro que no le escapa a los desafíos. Arrancó la semana pasada con un empate picante entre Argentinos Juniors e Independiente Rivadavia, donde tuvo que lidiar con los reclamos mendocinos y hasta le sacó la roja al DT Berti. Cualquiera se tomaba un descanso, pero no este juez. ¡Cuatro días después estaba en Arabia Saudita dirigiendo al mismísimo Cristiano Ronaldo!
De La Paternal a Riad: Ramírez, el trotamundos del arbitraje
El viernes, Ramírez impartió justicia en la derrota del Al Nassr ante Al Orobah por 2 a 1. Sí, leyó bien, el mismo equipo donde juega el Bicho. Si bien el partido fue clave para las aspiraciones del equipo de CR7 en la liga saudí -ahora están terceros a once puntos del líder-, la actuación de Ramírez fue, dentro de todo, tranquila. Cuatro amarillas, dos para cada lado, y a otra cosa mariposa. Un partido «a lo Mostaza Merlo», sin complicarse.
De Arabia a la final entre River y Talleres: Una agenda apretada
Pero la cosa no termina ahí para Ramírez. Apenas aterrice en Argentina, emprenderá viaje rumbo a Paraguay para dirigir la Supercopa Internacional entre River y Talleres. Sí, como lo lee, el miércoles estará en la Nueva Olla, la cancha de Cerro Porteño, para pitar una final que promete ser más caliente que plancha de Carlos Bilardo. Un partido que, como diría el Bambino Veira, «se define por detalles». Y ahí estará Ramírez, junto a sus asistentes Pablo González y Pablo Acevedo, para no perderse ni uno. En el VAR, el ojo de halcón será Lucas Novelli.
Árbitros argentinos: Exportación de talento a Arabia Saudita
La presencia de árbitros argentinos en Arabia Saudita ya es moneda corriente. Facundo Tello, Yael Falcón Pérez, Darío Herrera y el legendario Néstor Pitana ya han tenido su experiencia en tierras árabes. Parece que los jeques se cansaron de los fallos locales y buscan jueces extranjeros para poner orden. Y como dicen por ahí: «si Messi se fue para allá, ¿por qué no un árbitro?».
No solo los argentinos son requeridos, también llegan jueces de México, Inglaterra, España y otros países. Una especie de «Champions League» arbitral. Esto, según los saudíes, evita que los hinchas locales presionen a los árbitros, un problema que conoce bien cualquier equipo que visite la cancha de Boca. Para los jueces argentinos, es una oportunidad de ganar experiencia internacional, sumar unos mangos y, quién te dice, hasta dirigir a alguna figura mundial. Total, como diría el Chapulín Colorado: «no contaban con su astucia».
