Facundo Melillán, de Mitre de Santiago del Estero, le aplicó una patada digna de la época de Eliseo Mouriño a Gustavo Fernández, de Nueva Chicago, que solo vio la amarilla. El árbitro, Maximiliano Macheroni, pareció dirigir con el reglamento de tejo. Chicago ganó 1-0 y Mitre sigue sin sumar.
¿Patada criminal o simple roce? La polémica en Santiago del Estero
En Santiago del Estero, el calor no solo se sintió en el ambiente, sino también en la cancha. Facundo Melillán, defensor de Mitre, protagonizó una jugada que dejó a más de uno con la boca abierta, y no precisamente por su belleza. A los 44 minutos del primer tiempo, con el partido 0-0, Melillán se lanzó con una vehemencia propia de un gladiador romano sobre Gustavo Fernández, volante de Nueva Chicago. La imagen habla por sí sola: una plancha a la altura de la rodilla que bien podría haber terminado en fractura.
Lo increíble de la situación fue la sanción del árbitro, Maximiliano Macheroni. Para sorpresa de propios y extraños, Macheroni solo amonestó a Melillán con una tarjeta amarilla, como si se tratara de una falta común y corriente. ¿Se olvidó las tarjetas rojas en el vestuario? ¿Estaba probando un nuevo sistema disciplinario basado en la meditación? La polémica está servida.
Brutal patada de Melillán a Fernández.
Mitre sigue en caída libre, Chicago respira
Más allá de la polémica, el partido continuó. Fernández, como un Terminator criollo, volvió a la cancha en el segundo tiempo, aunque luego fue reemplazado. Nueva Chicago, con un gol de Iván Maggi, se llevó la victoria por 1-0. Con este resultado, el Torito de Mataderos sumó su primera victoria en el campeonato y llegó a los cuatro puntos. Mitre, en cambio, sigue hundido en el fondo de la tabla de la Zona B de la Primera Nacional, con cuatro derrotas en cuatro partidos. Un arranque para el olvido, que recuerda a la Selección Argentina en las eliminatorias para Corea-Japón… pero al revés.
