Fuerte bronca de Fernando Costas por la derrota de Racing ante San Lorenzo. El DT explotó contra el arbitraje de Facundo Tello y el VAR por un penal no cobrado a Zaracho: «Una vergüenza, para nosotros lo tienen suspendido».
Costas, entre la bronca y la resignación: ¿Robo del siglo o llorisqueo académico?
Venía de la gloria, de la fiesta en Brasil con la Recopa en el bolsillo. Y se fue del Nuevo Gasómetro masticando bronca, con una derrota que le pinchó el globo y un arbitraje que dejó más dudas que certezas. Una mezcla de decepción por el 3-2 en contra, después de ir ganando 2-1, y la furia por ese penal que Facundo Tello decidió ignorar, como si el VAR para Racing fuese un mito, una leyenda urbana al estilo del Pombero.
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Los reclamos de los jugadores de Racing a San Lorenzo
«Lo del penal fue una vergüenza, nunca nos van a ver del VAR a nosotros… Parece que para nosotros lo tienen suspendido. Nunca van a ver ninguna», disparó Costas en conferencia de prensa. Un Costas que parecía el Beto Alonso puteando contra la injusticia del fútbol, pero con un toque más de elegancia, eso sí. La jugada en cuestión: un planchazo de Romaña a Zaracho en el área que Tello, ni con lupa, quiso ver. Y el VAR, con Mauro Vigliano a la cabeza, brilló por su ausencia. ¿Se equivocó el juez o hubo mala intención? Ahí está el debate.
¿Penalazo o humo académico? El VAR y la eterna polémica
«En la cancha no vi si fue penal, pero después la vi. Fue una vergüenza ese penalazo. Tampoco voy a decir que perdimos por el árbitro. Capaz que lo errábamos», reconoció el DT, con una sinceridad digna de Mostaza Merlo. Pero la duda persiste: ¿por qué no lo cobraron? ¿Miedo escénico? ¿Desconocimiento del reglamento? ¿O directamente se hicieron los distraídos?
Más allá de la polémica arbitral, Costas también mostró su fastidio por la derrota. Racing, con 10 suplentes y el cansancio acumulado de la Recopa, dejó todo en la cancha, pero no alcanzó. Una derrota que duele, sobre todo por ser un clásico. «No soy de poner excusas, ustedes saben. Tengo una calentura bárbara por haber perdido el partido. No me gusta perder nada, y menos los clásicos», confesó Costas. Y cerró, con una frase que bien podría haber dicho el Bambino Veira: «Los chicos dieron todo lo que tenían que dar». ¿Será suficiente para calmar las aguas? Lo dudamos.
