Escándalo en Junín: un jugador de Barracas le escupió a un alcanzapelotas de Sarmiento antes del empate 1-1. El árbitro Merlos no sancionó la acción. ¿Jugada preparada a lo Bilardo o simple falta de respeto? El defensor intentó remediar la situación regalándole su camiseta al chico.
Sarmiento y Barracas empataron 1 a 1 en un partido que quedará en el recuerdo, pero no por el buen juego precisamente. El encuentro estuvo plagado de polémicas, incluyendo incidentes con cinco heridos de bala. Sin embargo, la situación que se robó todas las miradas ocurrió sobre el final del partido.
¿Barrios, el nuevo Lama? La escupida que incendió Junín
Cuando se jugaban siete de los once minutos adicionados por el árbitro Andrés Merlos, Rafael Barrios, defensor de Barracas Central, protagonizó una acción repudiable: escupió a un alcanzapelotas de Sarmiento. El banco local explotó, pidiendo la expulsión del jugador, pero Merlos hizo oídos sordos. Minutos después, llegó el empate del Guapo, dejando un sabor amargo en el paladar del Verde. ¿Casualidad o causalidad? ¿Habrá tenido que ver el incidente con el gol? Preguntas que dan vueltas en la cabeza como un córner olímpico de Riquelme en la Bombonera.
Sarmiento de Junín –
El momento en el que Barrios escupe al alcanzapelotas de Sarmiento
Del escupitajo al regalo: ¿Un acto de arrepentimiento?
Como si fuera poco, Barrios intentó “arreglar” la situación regalándole su camiseta al alcanzapelotas. El chico, con la templanza de un Goycochea en una tanda de penales, aceptó el obsequio y lo mostró a las cámaras. ¿Fue un gesto genuino de arrepentimiento o una simple estrategia para limpiar su imagen? La jugada, como diría Mostaza Merlo, «está para el debate».
Más allá del resultado deportivo, este partido dejó en evidencia la necesidad de erradicar la violencia y la falta de respeto en el fútbol argentino. Un llamado de atención para jugadores, árbitros y dirigentes. Porque como diría el Bambino Veira, «el fútbol es un juego, y en los juegos se debe ganar con honor».
