Franco Mastantuono, la joya de River, brilló en la victoria ante Atlético Tucumán y reconoció el bajo nivel del equipo en las últimas fechas. Gallardo lo retó en pleno partido, demostrando la exigencia que tiene con el juvenil, incluso en un buen partido.
Mastantuono, el pibe que se puso la 10 en la espalda
«Sabemos que no estamos en nuestro mejor nivel, pero trabajamos al 100% para estarlo. En la semana, el grupo se rompe el orto para que las cosas salgan bien». Con esta frase, casi que a lo Mostaza Merlo, arrancamos. Y sí, porque con apenas 17 pirulos, Franco Mastantuono, el pibe que gambeta hasta en el pasillo de su casa, se calzó la camiseta de River y la rompió toda contra Atlético Tucumán. Un partido chivo, que terminó 1 a 0, pero que tranquilamente podría haber sido un baile a lo Fillol contra Racing en el 75.
El zurdito, que ya lo tienen en la mira varios pesados de Europa, manejó los hilos del equipo de Gallardo como si fuera un veterano. Ubicado delante de la línea de volantes, asistió a Borja y a Colidio (que se movió como Lamela en la final de la Conference), y generó peligro constante con su pegada endiablada. La ovación que se llevó cuando lo cambiaron fue digna de un crack consagrado, tipo Palermo entrando en la Bombonera.
«Pateé como 80 veces, ja», tiró el pibe, con la humildad de un campeón. «El partido pedía eso, patear mucho… Por suerte, la de Colidio pudo entrar y ganamos». Y sí, no fueron 80, pero fueron un montón. Diez remates en total: tres al arco, cuatro desviados y tres bloqueados. Mastantuono fue un dolor de cabeza para los tucumanos, como lo fue Maradona para los ingleses en el 86. «Al hincha le agradecemos el apoyo y le digo que tenga paciencia porque vamos a dejar todo para que River esté en lo más alto», cerró el crack, con la mentalidad ganadora de un auténtico caudillo.
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Mastantuono estuvo cerca de tiro libre
El reto del Muñeco
Gallardo, que lo lleva de a poco como a un Ferrari nuevo, no le regala nada al pibe. Lo exige al máximo, como a todos. Y en una jugada puntual, cerca del final, el Muñeco se calentó porque Mastantuono no acompañó en una presión y le tiró: «¡Franco, vení, vení! ¡Dale o te saco! ¿Te saco? ¿Te cambio ahora? ¡Dale!». Un reto a lo Bilardo, pero con cariño de padre. Después, el DT y el juvenil tuvieron una charla, tipo maestro-alumno, y finalmente Mastantuono salió para que debutara Costantini. Una muestra de que, aunque la rompa toda, el pibe tiene que seguir aprendiendo.
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La advertencia de Gallardo a Mastantuono
Por: Juan Román (para )