Franco Colapinto arranca la temporada de F1 como piloto de reserva de Alpine en Australia. Solo subirá al auto si Gasly o Doohan tienen algún imprevisto grave, tipo si se les cruza un canguro en la pista o les agarra un ataque de hipo incontrolable.
Colapinto, el as bajo la manga de Alpine en Australia
Franco Colapinto se pone la pilcha de reserva para el debut de Alpine en la temporada 2025 de la Fórmula 1, que se larga este finde en el Gran Premio de Australia. El piloto argentino, que viene de meterle pata en Williams en la recta final del 2024, espera agazapado la chance de subirse al monoplaza.

Como en el fútbol, donde tenés al suplente que entra cuando el 9 se acalambra, en la F1 cada escudería tiene un piloto de reserva pa’ los imprevistos. Claro, no es que se suben al auto porque al titular le dio fiaca o se quedó dormido, sino por cuestiones más serias, tipo una lesión o un accidente. En el caso de Colapinto, solo verá acción si Pierre Gasly o Jack Doohan tienen un percance digno de telenovela. Imaginen a Gasly con un ataque de hipo incontrolable o a Doohan encontrándose con un canguro en medio de la clasificación… ahí sí, Franquito al rescate.

¿Cuándo se vio algo así? Repasemos la historia
Si bien no es común ver a un reserva en acción, hay antecedentes. El año pasado, en Arabia Saudita, Oliver Bearman (hoy en Haas) tuvo que ponerse el overol de Ferrari porque a Carlos Sainz Jr. le agarró apendicitis. Bearman se la bancó como un campeón y terminó séptimo, sumando unos puntitos que no venían mal. Otro caso fue el de Liam Lawson (actualmente en Red Bull), quien reemplazó a Daniel Ricciardo en Países Bajos 2023 luego de que el australiano se fracturara la mano en un entrenamiento. Lawson, con un rendimiento a lo Mostaza Merlo («paso a paso»), se ganó un lugar en la grilla.

El caso Badoer: Cuando ser suplente no es joda
Pero no todos los reemplazos terminan con final feliz. En 2009, Luca Badoer entró por Felipe Massa (que sufrió una fractura de cráneo en Hungría luego de que le cayera un resorte en la cabeza) y la cosa no salió bien. El pobre Badoer terminó último en tres carreras seguidas y lo bajaron del auto más rápido que a De Paul de la Selección en el Mundial de Qatar.
Así que Colapinto ya sabe: estar de reserva es como ser el arquero suplente, hay que estar listo para atajar penales en cualquier momento, pero esperando que al titular no le pase nada grave… salvo que se coma un asado con chimichurri picante antes de la carrera.