Demichelis, tras la eliminación de Rayados en la Concachampions, se enfoca en Pumas con el respaldo del plantel. Micho, con la mira puesta en el Mundial de Clubes, busca levantar cabeza en la Liga MX.
¿Demichelis tambalea en Monterrey? El plantel bancó a Micho tras el papelón en la Concachampions
La eliminación de Rayados de Monterrey en la Concachampions fue un golpe bajo, como un planchazo de Passarella en el área chica. Una derrota que dejó secuelas y puso en el ojo del huracán a Martín Demichelis, el DT que supo brillar en River y la Selección. Micho, con la presión de un Mundial de Clubes en el horizonte, tiene la obligación de enderezar el barco en la Liga MX.
Según pudimos averiguar en USA-MX, el clima en el vestuario rayado es de apoyo al entrenador. Los jugadores bancaron a Micho, reconociendo el palazo que significó la eliminación pero con la convicción de que el equipo puede dar vuelta la página. Algo así como cuando el Beto Alonso metía un caño y te hacía olvidar del gol que te habían hecho minutos antes.
El Mundial de Clubes, la zanahoria en el horizonte para Demichelis
El traspié en la Concachampions duele, pero no hay tiempo para lamentarse. Con el Mundial de Clubes a la vuelta de la esquina, Demichelis ya piensa en Pumas, el próximo rival en la Liga MX. La idea es clara: ganar para recuperar la confianza y llegar con el envión anímico necesario a la cita mundialista. ¿Será capaz Micho de gambetear la crisis y llevar a Rayados a la gloria? Veremos. Habrá que estar atentos, como cuando Ruggeri marcaba a Maradona, sin perderle pisada ni un segundo.
Micho, con la cabeza en alto: «Vamos a dejar todo en la cancha»
Este partido contra Pumas se presenta como una final anticipada para Demichelis. Una victoria sería como meter un gol en el último minuto, un desahogo para el DT y una inyección de ánimo para el plantel. Se viene una parada brava, pero si algo tiene este equipo es garra. Ojalá que los jugadores se pongan la camiseta, como lo hacía el Burrito Ortega en sus mejores épocas, y dejen todo en la cancha.