Rafa Di Zeo zafó del juicio por tenencia de armas en Córdoba. Le dieron probation y deberá cumplir ciertas condiciones para evitar la condena, pero ¿podrá volver a la Bombonera? La respuesta es más compleja que un penal de Palermo atajado por el Pato Fillol.
¿Rafa Di Zeo de vuelta en la Bombonera? Probation y polémica en puerta
La Justicia de Jesús María, Córdoba, le otorgó la suspensión del juicio a prueba (probation) a Rafael Di Zeo, el jefe de la barra brava de Boca, por el caso de tenencia de arma de guerra ocurrido el año pasado antes del partido con Estudiantes. Recordemos, para los que tienen memoria de pez, que el quilombo se armó cuando la policía encontró un arsenal en el micro de la barra, que parecía la utilería de Rambo: cuatro armas con la numeración limada y una con el logo de la Federal, más municiones que para una guerra de guerrillas.
Para zafar del juicio, Di Zeo, que siempre negó haber estado en ese micro (como si fuera el hombre invisible), tendrá que cumplir tres requisitos durante dos años y medio. Primero, deberá resarcir a la provincia de Córdoba con una suma que, según dicen, dejaría temblando hasta al Tano Pasman. Segundo, tendrá que hacer terapia psicológica para que le bajen un cambio a su agresividad futbolera. Y tercero, deberá hacer trabajos comunitarios, seguramente pintando escuelas o plantando árboles, para redimirse como si fuera el mismísimo Rocky Balboa.
La gran pregunta: ¿podrá volver a la cancha?
Ahora bien, la pregunta del millón es: ¿esta probation le abre las puertas de la Bombonera a Di Zeo? Ahí es donde la cosa se pone picante. Algunos dicen que al no tener una restricción explícita de la Justicia cordobesa, podría volver a pisar el templo xeneize. Otros, en cambio, argumentan que la prohibición del Ministerio de Seguridad de la Nación sigue vigente, y que la probation no la modifica, o sea, que Di Zeo seguiría con el cartelito de «prohibido el ingreso» colgado en la puerta.
El tema es que la Ministra Bullrich ya avisó que con ella no hay tutía, y que la sanción a Di Zeo es a perpetuidad, como la Champions del Rojo. Además, tiene un as bajo la manga: la causa por la instigación a cometer homicidios en el enfrentamiento de la barra en 2013, que si bien terminó con Di Zeo absuelto, todavía podría ser utilizada para impedir su regreso a los estadios. O sea, un verdadero laberinto judicial digno de un capítulo de El Chavo del 8.
Así detuvieron el micro de la barra de Boca camino a Córdoba
Las armas de la barra de Boca estaban camufladas en el micro
Por ahora, Di Zeo y su entorno prefieren no hacer olas y esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Ir a la carga por la vía judicial en este momento sería como patear un penal con los ojos cerrados: impredecible. Lo que sí es seguro es que este caso seguirá dando tela para cortar, y que la polémica sobre el regreso de Di Zeo a la Bombonera recién empieza. Prepárense para el debate, porque esto promete ser más largo que un partido con alargue y penales.