La Pulga llega con el tanque lleno a la Selección: a pesar de la dosificación de minutos en el Inter Miami, Messi metió seis goles y cuatro asistencias en diez partidos. ¿Le alcanzará para gambetear a Uruguay y Brasil?
Messi, entre algodones y goles: ¿Llega afilado para la Selección?
Lionel Messi arrancó el 2025 como si fuera un pendex, demostrando que a los 37 pirulos todavía le queda cuerda para rato. En el Inter Miami, entre partido y partido, el capitán argentino la rompió cada vez que pisó el césped. Seis goles y cuatro asistencias en diez encuentros son números que hablan por sí solos, como si fuera el promedio de goles de Palermo en Boca.
Ahora, con la celeste y blanca puesta, el objetivo es abrochar el pasaje al Mundial. Y el camino empieza con dos partidazos bravos: Uruguay y Brasil por Eliminatorias. ¿Se imaginan a Messi haciendo la de Caniggia contra Brasil en el 90? Ojalá…
El 19 de enero, Lío se despachó con un golcito en el amistoso contra el América de México (2-2). Un par de días después, la volvió a mandar a guardar en la paliza 5-0 al Olimpia de Honduras, con dos asistencias de yapa. Ya en modo oficial, Messi mojó en los dos partidos contra el Sporting Kansas City por la Concacaf Champions League. Y en su debut en la MLS, si bien no convirtió, metió dos pases gol para el agónico empate contra el New York City.
¿Cuidando al 10 o especulando con el Mundial?
Después de un arranque furioso, Mascherano, el Jefecito, y Messi decidieron bajar un cambio para cuidar al físico de la Pulga, como si fuera un Fórmula 1 antes de la carrera principal. Se perdió un par de partidos de la MLS y la ida de octavos de la Concachampions. Recordemos que en el 2024, Leo tuvo algunos problemitas musculares que lo dejaron afuera de varios encuentros, onda el Bambino Veira con sus lesiones.
Volvió para la vuelta contra el Cavalier de Jamaica, ya con la serie liquidada, y clavó un zurdazo para seguir sumando goles a su cuenta personal. Y este domingo, contra el Atlanta United, la volvió a embocar en el triunfo 2-1. El Inter Miami, de la mano de Messi, está intratable: puntero en la Conferencia Este de la MLS y en cuartos de la Concachampions, donde se verá las caras con Los Ángeles FC.
Messi: ¿La misma magia con menos nafta?
A los 37 años, Messi ya no es el mismo velocista de antes, pero compensa la falta de explosividad con su magia intacta y una inteligencia que da miedo. Ahora, con los minutos dosificados cual café en filtro, aprovecha cada segundo en la cancha para ser determinante, como el Beto Alonso en River.
Uruguay y Brasil serán una prueba de fuego para ver cómo se para Leo ante las figuras del fútbol mundial. Además, tendrá la responsabilidad de guiar a la Scaloneta hacia la clasificación al Mundial. ¿Alcanzará con la magia del 10 para traerse algo positivo de esta doble fecha? La gente quiere saber… El debate está abierto.