Nacho Piatti le embargó la sede a San Lorenzo por una deuda millonaria. El ídolo del Ciclón reclama 2.700.000 dólares por su salida conflictiva del club en 2021.
La paz en Boedo se hizo trizas. Miguel Ángel Russo, con su laburo de hormiga, armó un equipo que con poco hace mucho y tenía a todos enfocados en la pelota. Pero el fantasma del pasado volvió a aparecer: Ignacio Piatti, campeón con el Ciclón en 2013 y 2014, pidió un embargo a la Justicia que incluye la sede de Avenida La Plata. Se pudrió todo.
¿Qué pasó entre Piatti y San Lorenzo? Un quilombo de aquellos…
Nacho, hoy retirado y comentando la MLS, reclama casi 3 palos verdes por su última etapa en el club. Volvió a Boedo en 2020 con bombos y platillos, pero al año siguiente, en medio de un vestuario que parecía la selección de Croacia del 98 (puro crack, pero con internas bravas), agarró sus cosas y se fue.
Tenía contrato por dos años y medio, pero había una cláusula estilo “Mostaza Merlo”: cualquiera de las dos partes podía romperlo pagando 850.000 dólares. Los dirigentes de ese entonces, con una mano en el corazón y la otra en la billetera, decidieron cortar por lo sano.
Piatti, como el Beto Alonso gambeteando defensores en el área, no se quedó de brazos cruzados. Consideró que lo habían echado y les inició una demanda por varios millones, aprovechando la doble indemnización que había por la pandemia. Si bien pagaron la interrupción del contrato después de un fallo judicial, la cosa no terminó ahí… El reclamo inicial era de casi 8 millones de dólares. ¡Un golazo de media cancha!
El conflicto siguió en la Justicia, cual partido con alargue y penales. Un juez dictaminó que el acuerdo para rescindir no corría y le dio la derecha a Nacho. Hubo amparos, apelaciones y hasta llegó a la Corte Suprema. Al final, la Justicia determinó que San Lorenzo debe pagarle 2.700.000 dólares. Como el tiempo pasó y la deuda no se saldó, Piatti, cual Palermo en la final con Boca, ejecutó el embargo.
La herencia de Tinelli: El conflicto con Piatti nació durante su mandato en San Lorenzo
Todo este lío se cocinó en la época de Marcelo Tinelli como presidente. El Cabezón fue quien lo trajo de vuelta y también quien estuvo al mando cuando se decidió su salida. En ese momento, Marcelo Moretti, actual presidente del CASLA, era vocal y parte del Consejo de Fútbol. ¿Habrá aprendido algo de ese Bochini dirigencial?
¿Y ahora? En Boedo se agarran la cabeza. Rematar la sede, un símbolo para el hincha, es como perder la final del mundo en el último minuto. Algo impensado. Antes, seguramente, retendrán las cuentas del club y otros ingresos. Lo que está claro es que, de una forma u otra, San Lorenzo deberá desembolsar los 2.700.000 dólares para pagarle a Piatti. Esto recién empieza…
